"No es ilógico pensar en un pacto global con el PSOE, pero tampoco razonable anticiparlo"

La alcaldesa de Córdoba, Rosa Aguilar, de 42 años, se enfrenta al reto de sacar adelante su mandato, con un Gobierno compartido con los socialistas, grupo con el que mantuvo importantes discrepancias en un pasado aún muy reciente. En la entrevista, Aguilar subraya que el acuerdo con el PSOE se basa en puntos programáticos. Pregunta. ¿Cuál es su valoración de estas primeras semanas en la alcaldía y, sobre todo, de la coalición con los socialistas? Respuesta. Están siendo días de muchísimo trabajo, pero merece la pena porque van dando sus resultados. Cada delegado ya ha asumido la responsabilida...

La alcaldesa de Córdoba, Rosa Aguilar, de 42 años, se enfrenta al reto de sacar adelante su mandato, con un Gobierno compartido con los socialistas, grupo con el que mantuvo importantes discrepancias en un pasado aún muy reciente. En la entrevista, Aguilar subraya que el acuerdo con el PSOE se basa en puntos programáticos. Pregunta. ¿Cuál es su valoración de estas primeras semanas en la alcaldía y, sobre todo, de la coalición con los socialistas? Respuesta. Están siendo días de muchísimo trabajo, pero merece la pena porque van dando sus resultados. Cada delegado ya ha asumido la responsabilidad que le ha sido dada y mantenemos asiduamente reuniones del Gobierno para evaluar las necesidades de la ciudad. P. ¿En el reparto de áreas da la impresión de que el PSOE gestiona las más importantes? R. Eso no es así desde la perspectiva fundamental de que para nosotros lo importante son los acuerdos programáticos. Hay un espacio común de trabajo, y partiendo de esa base hay distintas responsabilidades que se han distribuido, creo yo, de manera muy equilibrada. P. Sí, pero está el dato de que los socialistas manejan tanta o más inversión que IU. R. No. Hay que tener en cuenta que la inversión no la maneja nadie, la maneja el Gobierno, que es el que la decide a la hora de elaborar los presupuestos. Además no van a ser unos presupuestos elaborados al uso, sino con la participación de los ciudadanos. Es el Gobierno el que determina dónde se va a invertir, cuáles son los grandes proyectos que se van a abordar y cuáles las pequeñas obras. P. El pacto se firmó en base a una afinidad política, agrupando las fuerzas de progreso. Parece lógico extrapolarlo a las elecciones autonómicas. R. Creo que lo importante ahora es acometer esta nueva etapa, que discurre en el ámbito municipal, de relaciones entre la izquierda, de entendimiento programático. No se puede decir si va a haber lugar a otras etapas nuevas en otros ámbitos o si se va a circunscribir sólo al municipal. Lo importante es que se ha iniciado otra etapa; después, ya se verá. P. Pero, es lógico pensar en un acuerdo global entre el PSOE e IU. R. No es ilógico pensarlo pero tampoco es razonable anticiparlo. Ahora lo más importante es constatar que en esta nueva andadura, que es un reto para los dos, funcionamos bien y somos eficaces. Ése es el trabajo que tenemos que desarrollar. Si luego se dan otras circunstancias ya veremos, no quiero hacer hipótesis. Lo mejor que puede pasar en las autonómicas es que cada fuerza política, desde su soberanía y su independencia, realice sus propuestas, y después de las elecciones veremos qué situación se configura y qué posibilidades hay. Lo mas importante, prioritario y necesario, es demostrar que el pacto es útil para Córdoba, que los ciudadanos mejoran. Mostrar que somos capaces de tener una sincronía total en la nueva andadura. Eso luego siempre da lugar a nuevas posibilidades, nuevas oportunidades de lo que es la relación de dos fuerzas políticas. P. Con esta unión de la izquierda, ¿qué cambios puede esperar la gente respecto al equipo anterior del PP? R. Fundamentalmente cinco cosas. Una, la participación real y efectiva de la ciudadanía en el Gobierno municipal, algo que estaba en unos índices bajo mínimos. Segundo, mayores inversiones en las barriadas, reequilibrar la ciudad. Y no estoy diciendo con esto que haya que olvidarse del centro. Tercero, poner en marcha instrumentos de redistribución social, un gran impulso a los servicios sociales, que los hemos encontrado prácticamente desmantelados. Cuarto, la actividad cultural, que es un punto de diferencia y referencia para la izquierda, una cultura viva en la que el ciudadano no sea sólo perceptor sino el propio actor. Y, quinto, una apuesta clara por el sector público y una transparencia total en el funcionamiento del Ayuntamiento. P. Usted habló de la igualdad de la mujer o el respeto a las tendencias sexuales. ¿Qué puede esperar una mujer o un homosexual que no tuviera con Merino? R. Vamos a crear el Departamento de Igualdad, que va a promover dentro del comportamiento de la ciudadanía actitudes de absoluta normalidad, para una integración plena y total de todos. Debe incluir también a los inmigrantes. El departamento se constituirá de inmediato y las medidas concretas habrán de determinarse con los diferentes colectivos afectados. P. ¿Que le parece que Merino vaya a compatibilizar su puesto en el Ayuntamiento con la portavocía del PP en el Parlamento autonómico? R. Cada partido toma sus decisiones y yo las respeto. Lo que dudo es la comparación que ha hecho Merino con mi caso. Un cargo de portavoz no es lo mismo que el de un diputado. Simultanear las funciones que le han sido encomendadas parece que es más difícil, en todo caso el tiempo dirá. P. Da la impresión de que su condición de diputada le impide mojarse. R. No, no. Yo he dejado la portavocía y he puesto mi escaño a disposición de IU. Él si que tiene que tentarse la ropa con lo que dice porque Celia Villalobos o Teófila Martínez también son diputadas. Yo he hecho lo que tenía que hacer, lo que pasa es que estamos en el ultimísimo tramo de la legislatura y eso puede dar lugar a que tenga que simultanear. P. Desde su partido se dice además que así podrá presionar a los ministros que tanto prometieron a Córdoba en la campaña. R. De este tiempo va a salir beneficiada la ciudad porque mis viajes a Madrid van a ser con los proyectos de Córdoba bajo el brazo. Voy a utilizar el tiempo que resta a la legislatura para sentarme con todos los ministros e intentar que esos compromisos se vean reflejados en los presupuestos. P. ¿Ha descartado presentarse en las próximas elecciones generales? R. Sí claro, eso está descartado. No porque sea incompatible sino por el compromiso que adquirí con la ciudad. P. La pasada semana se conoció la pérdida de los 1.600 millones por el PP, de fondo siguen las cuentas de Manolete, ¿se va a tirar de la manta? R. Tenemos una obligación moral y ética con la ciudad: poner transparencia donde estaba todo tapado. El Ayuntamiento colaborará con el poder judicial. Todo lo que los tribunales demanden sobre las cuentas de Manolete se va a facilitar. Es nuestra obligación como institución. En cuanto a los 1.600 millones, creo que ha sido una indecencia política. Cuando en el mes de mayo se deja pasar el plazo para recurrir, se debió informar a los grupos municipales. Si alguien tomó la decisión de no interponer el recurso, ahora, lo razonable es que responda. P. Entonces habrá tirón de la manta. R. No, no , es que de la manta hay que tirar. No puede haber una manta que todo lo tapa. Aquí, claridad, transparencia, honradez y honestidad y que cada cual asuma su responsabilidad.

"Tenemos la obligación ética y moral de poner transparencia donde estaba todo tapado" "Está descartado que me presente a las generales por el compromiso que adquirí con la ciudad"