Víctimas
Referente a la carta de Concha Martín publicada el lunes, cabe decir que se pueden contar impresiones e historias mucho más truculentas de los kosovres. Una cosa son las equivocaciones -lamentables- de los bombardeos y otra la represión directa y sin equívocos que los esbirros de Milosevic efectúan sobre los refugiados. Éstos no tienen, además, teléfonos para llamar a nadie en el exterior y contarle las matanzas. Pueden terminarse los bombardeos, pero no habrá paz hasta que no se resuelva el conflicto de fondo.-...
Referente a la carta de Concha Martín publicada el lunes, cabe decir que se pueden contar impresiones e historias mucho más truculentas de los kosovres. Una cosa son las equivocaciones -lamentables- de los bombardeos y otra la represión directa y sin equívocos que los esbirros de Milosevic efectúan sobre los refugiados. Éstos no tienen, además, teléfonos para llamar a nadie en el exterior y contarle las matanzas. Pueden terminarse los bombardeos, pero no habrá paz hasta que no se resuelva el conflicto de fondo.-