Flying Rebollos se despiden durante varios meses del público vasco
La de mañana en el Kafe Antzokia se presenta como la última oportunidad de ver actuar a los Flying Rebollos en Euskadi, al menos en los próximos meses. En el local bilbaíno (22.00) ofrecerán un concierto junto al grupo aragonés J.P.S. Brown, lo que promete ser una velada protagonizada por el rock and roll. La curtida banda portugaluja repasará una vez más las canciones incluidas en Esto huele a pasta (Dro), un segundo álbum que rezuma desenfadado rock and roll. Aderezado con esencia de sudoroso rhythm and blues, sostenido con nítidos riffs de guitarra y adornado con incisivos solos, el disco ...
La de mañana en el Kafe Antzokia se presenta como la última oportunidad de ver actuar a los Flying Rebollos en Euskadi, al menos en los próximos meses. En el local bilbaíno (22.00) ofrecerán un concierto junto al grupo aragonés J.P.S. Brown, lo que promete ser una velada protagonizada por el rock and roll. La curtida banda portugaluja repasará una vez más las canciones incluidas en Esto huele a pasta (Dro), un segundo álbum que rezuma desenfadado rock and roll. Aderezado con esencia de sudoroso rhythm and blues, sostenido con nítidos riffs de guitarra y adornado con incisivos solos, el disco también incluye sentidos medios tiempos que remiten a los más inspirados Burning. La biografía de los Flying Rebollos arranca en 1991 en Portugalete y narra el devenir de un honesto sexteto de rock and roll sacudido por cambios internos, baqueteado en numerosos escenarios y responsable de una maqueta y dos notables elepés que, pese a los elogios de la crítica, no han trascendido más allá de la escena underground. "Aunque ha habido momentos jodidos, el balance es positivo. Creo que estamos donde tenemos que estar. Si no estamos más arriba es porque el público no lo cree necesario. El rock and roll se muere desde que nació y no creo que tengamos por qué ser un grupo de éxito". Esta reflexión la hace Edorta Arostegui, cantante y principal compositor, cuando faltan menos de dos meses para que los Flying Rebollos, un tanto quemados a estas alturas, se retiren temporalmente de la circulación. El próximo 17 de abril compartirán tablas con los británicos Dr. Feelgood en Segovia y, a partir de entonces, finalizada la actual gira y mientras esperan que renazcan las ganas de subirse a un escenario, buscarán en el retiro la inspiración que ayude a producir nuevas canciones. Sus teloneros en Bilbao, J.P.S. Brown, presentarán las canciones de Karmaneón, un compacto cuyas cuatro canciones constituyen un ejercicio de rock setentero que refleja la evolución experimentada por el grupo tras debutar en 1996 con el disco Sólo me duele cuando respiro.