Aznar invita a EH a sumarse al diálogo para el proceso de paz

El presidente del Gobierno, José María Aznar, quiere que Euskal Herritarrok, la formación sucesora de Herri Batasuna, esté presente en el diálogo que pretende abrir con los partidos políticos para consolidar el proceso de paz abierto tras la tregua de ETA. Así lo dejó traslucir ayer en la declaración institucional que hizo en el palacio de la Moncloa y en la que afirmó que el cese definitivo de la violencia -"piedra angular del proceso de normalización"- no es la contrapartida de un precio político.

La de ayer fue la tercera declaración del presidente del Gobierno sobre el desarrollo de...

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El presidente del Gobierno, José María Aznar, quiere que Euskal Herritarrok, la formación sucesora de Herri Batasuna, esté presente en el diálogo que pretende abrir con los partidos políticos para consolidar el proceso de paz abierto tras la tregua de ETA. Así lo dejó traslucir ayer en la declaración institucional que hizo en el palacio de la Moncloa y en la que afirmó que el cese definitivo de la violencia -"piedra angular del proceso de normalización"- no es la contrapartida de un precio político.

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La de ayer fue la tercera declaración del presidente del Gobierno sobre el desarrollo de la tregua etarra. Aznar, que anunció el envío al Congreso de un texto legal para regular las ayudas a las víctimas del terrorismo, acreditó con su intervención la existencia de contactos que al Ejecutivo le permiten afirmar que la tregua "sigue manteniendo posibilidades de consolidarse como cese definitivo de la violencia". El ministro portavoz del Gobierno, Josep Piqué, fue más explícito, y en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros dijo que la declaración de Aznar se produjo como consecuencia de que el Ejecutivo ya ha establecido "contactos significativos" con el entorno etarra. Hace sólo una semana, el mismo portavoz afirmó que los contactos mantenidos hasta entonces no habían sido significativos. La declaración del presidente Aznar tuvo como prólogo el anuncio oficial del traslado a cárceles de la Península de los 21 presos etarras que cumplían condena en las islas, Ceuta y Melilla. La medida fue considerada insuficiente por PNV y EH, que la criticaron con dureza. Entre los trasladados figuran presos como Domingo Troitiño, responsable del atentado contra el Hipercor de Barcelona, o Ignacio de Juana, con 13 asesinatos a sus espaldas y que pidió champaña y langostinos para celebrar el asesinato de un concejal de UPN en Pamplona.

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