Europa unirá su laboratorio a la estación tras el 2000
Aunque EE UU y Rusia protagonizan la primera etapa de construcción y montaje de la Estación Espacial Internacional (ISS), los otros dos socios principales (Europa y Japón) preparan ya su contribución, que cobrará importancia a partir del 2000.Los 450.000 millones de pesetas que Europa aporta a la ISS, a través de la Agencia Europea del Espacio (ESA), se concretan en dos piezas clave: el laboratorio Columbus y un vehículo de carga que enviará suministros y equipos a la estación. Ambos se lanzarán después del año 2000. Diez países europeos colaboran en estos proyectos, entre ellos España,...
Aunque EE UU y Rusia protagonizan la primera etapa de construcción y montaje de la Estación Espacial Internacional (ISS), los otros dos socios principales (Europa y Japón) preparan ya su contribución, que cobrará importancia a partir del 2000.Los 450.000 millones de pesetas que Europa aporta a la ISS, a través de la Agencia Europea del Espacio (ESA), se concretan en dos piezas clave: el laboratorio Columbus y un vehículo de carga que enviará suministros y equipos a la estación. Ambos se lanzarán después del año 2000. Diez países europeos colaboran en estos proyectos, entre ellos España, que aporta 9.000 millones de pesetas de 1995 al 2000.
El Columbus -COF, siglas en inglés de Columbus Orbital Facility- es uno de los seis laboratorios que tendrá en total la estación. Lo desarrolla un consorcio de 41 empresas, con la alemana Daimler-Benz Aerospace a la cabeza, y en el que es clave la española Sener. En él podrán realizarse 500 experimentos al año en ciencia de materiales, medicina, biología y, en general, en nuevas tecnologías. Es un cilindro de casi 7 metros de largo y 4,5 de diámetro.
El vehículo de carga ATV (Automated Transfer Vehicle)no irá tripulado y su primer vuelo será el 2002, con el recién estrenado cohete europeo Ariane 5. Después se lanzarán ocho más de estas cápsulas. Les caben cinco toneladas de carga: comida, agua, combustible, etcétera. En su construcción, liderada por la compañía francesa Aerospatiale, participan CASA y otras empresas españolas.
Además, la ESA suministrará diversos equipos a la NASA y a la Agencia Espacial Rusa, como un brazo robótico que se acoplará al segmento ruso de la estación. Cuando la ISS esté en funcionamiento, uno o dos astronautas europeos la habitarán cada año durante periodos de hasta 4 meses.