El edil de Cultura de Alicante explica hoy un polémico alquiler
El responsable del área de Cultura del Ayuntamiento de Alicante, el concejal Pedro Romero, del PP, comparecerá hoy ante el pleno municipal para explicar los pormenores de un polémico contrato que firmó con el propietario de un local, que establecía el alquiler mensual de las instalaciones por 350.000 pesetas, cantidad superior a las 195.000 pesetas que aconsejaban los técnicos. La comparecencia responde a una solicitud de los partidos de la oposición, que señalaron que el expediente administrativo tenía una serie de errores y denunciaron un presunto trato de favor hacia una persona a la que s...
El responsable del área de Cultura del Ayuntamiento de Alicante, el concejal Pedro Romero, del PP, comparecerá hoy ante el pleno municipal para explicar los pormenores de un polémico contrato que firmó con el propietario de un local, que establecía el alquiler mensual de las instalaciones por 350.000 pesetas, cantidad superior a las 195.000 pesetas que aconsejaban los técnicos. La comparecencia responde a una solicitud de los partidos de la oposición, que señalaron que el expediente administrativo tenía una serie de errores y denunciaron un presunto trato de favor hacia una persona a la que se le suponen lazos de amistad con el concejal. El propio Romero ha adelantado que su explicación ante la Corporación será "clarificadora". El edil, respaldado por el alcalde de la ciudad, Luis Díaz Alperi, declaró en plena polémica que el asunto era "absolutamente legal", aunque días más tarde el alquiler fue revocado a solicitud del propietario del local. La oposición, por su parte, aseguró ayer que la sesión será "movida", en un intento de forzar al PP a asumir responsabilidades políticas. La polémica surgió hace unas semanas cuando la concejalía de Cultura alquiló por 10 años un local de la avenida de Canalejas para destinarlo a sala municipal de exposiciones. El informe de los técnicos municipales aconsejaba al Ayuntamiento pagar 195.000 pesetas mensuales por este local de 144 metros cuadrados. Una treintena de preguntas Sin embargo, Romero fijó el precio del arrendamiento en 350.000 pesetas, pese a que el montante final de la operación requería una aprobación previa de la Comisión de Gobierno. El alud de críticas que provocó esta adjudicación llevó al dueño del local a revocar el alquiler. Esta decisión, sin embargo, no impidió que los grupos políticos del Ayuntamiento solicitaran a Romero una explicación pública sobre su actuación en este asunto. Romero ha negado desde el primer momento que actuara por "amiguismo". "Se va a dar cumplida cuenta a la treintena de preguntas que han planteado los grupos de la oposición", aseguró sobre el pleno de hoy. "Otra cosa muy distinta es que ellos quieran entenderlo. Es posible que acabe el pleno sin que se enteren", añadió. El concejal Pedro Romero precisó: "Voy a intervenir porque nunca eludo mis responsabilidades", y acusó a la izquierda de querer "armar bulla y lío". Las presiones al edil de Cultura no sólo son políticas. La fiscalía de la Audiencia de Alicante, que investiga el contrato de alquiler, ha solicitado esta semana al Ayuntamiento toda la documentación del proceso administrativo seguido en este caso.