En manos de Garzón

La ejecución de la sentencia del caso Marey, con la consecuente pérdida por parte de José Barrionuevo de su fuero de diputado, incrementa la presión judicial sobre el exministro y Rafael Vera. Particularmente, en los sumarios abiertos en la Audiencia Nacional que controla su antiguo compañero de lista electoral, el juez Baltasar Garzón, quien estaba a la espera del resultado del primer juicio a la antigua cúpula de Interior.De forma sintomática, al día siguiente de volver de sus vacaciones, Garzón reactivó un sumario desglosado del caso Marey preguntando al fiscal si había razones para oponers...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La ejecución de la sentencia del caso Marey, con la consecuente pérdida por parte de José Barrionuevo de su fuero de diputado, incrementa la presión judicial sobre el exministro y Rafael Vera. Particularmente, en los sumarios abiertos en la Audiencia Nacional que controla su antiguo compañero de lista electoral, el juez Baltasar Garzón, quien estaba a la espera del resultado del primer juicio a la antigua cúpula de Interior.De forma sintomática, al día siguiente de volver de sus vacaciones, Garzón reactivó un sumario desglosado del caso Marey preguntando al fiscal si había razones para oponerse a su cierre, toda vez que, según él, ya no quedan diligencias de investigación que practicar.

En este sumario se encuentran procesados por un presunto delito de malversación Vera; su antiguo secretario particular, Juan de Justo; Félix Hernando, coronel de la Guardia Civil, y Aníbal Machín, agente, por el presunto pago a los ex policías José Amedo y Michel Domínguez de cerca de 200 millones de pesetas, a cada uno, en cuentas abiertas en Suiza a nombre de sus respectivas esposas.

En la misma causa, que Garzón quiere liquidar este mes, el excomisario Miguel Planchuelo, condenado a nueve años y seis meses en el caso Marey, está procesado por los seis asesinatos frustrados en los bares Batzoki y La Consolation, por los que Amedo y Domínguez fueron condenados a 108 años.

Garzón tiene más sumarios pendientes, como los casos Mon Bar y Oñederra, que se encuentran más desordenados.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En