Amsterdam crea un programa para dar trabajo a los delincuentes de la ciudad

Las autoridades locales de Amsterdam están convencidas de que hay que ayudar a los jóvenes delincuentes para que regresen al buen camino y evitar además que luego se aparten de él. De ahí que hayan puesto en marcha un proyecto para proporcionar trabajo a varios centenares de habituales de las comisarías o, en su defecto, darles la formación necesaria para que puedan encontrarlo. Según sus cálculos, en poco más de un año, cerca de un millar de pequeños criminales y delincuentes potenciales tendrán un empleo que les saque de la calle.

"Tener trabajo, casa y dinero ayuda a evitar que los m...

Las autoridades locales de Amsterdam están convencidas de que hay que ayudar a los jóvenes delincuentes para que regresen al buen camino y evitar además que luego se aparten de él. De ahí que hayan puesto en marcha un proyecto para proporcionar trabajo a varios centenares de habituales de las comisarías o, en su defecto, darles la formación necesaria para que puedan encontrarlo. Según sus cálculos, en poco más de un año, cerca de un millar de pequeños criminales y delincuentes potenciales tendrán un empleo que les saque de la calle.

"Tener trabajo, casa y dinero ayuda a evitar que los males vayan a mayores" asegura Hans Joosten, portavoz del Ayuntamiento. Los jóvenes que participen en el proyecto serán seleccionados entre viejos conocidos de la policía que hayan cometido delitos de poca envergadura. Quedan excluidos, por tanto, los homicidas y autores de otros delitos graves.Ya en 1996 hubo en Amsterdam un proyecto de semejantes características que no dio los resultados esperados. Entonces se dejó la selección en manos exclusivamente de la policía, y se abrió la participación también a muchachos que habían sido condenados por delitos graves. Para suplir aquellas deficiencias, ahora se crearán en cada barrio unas comisiones compuestas por representantes de la policía, organizaciones juveniles, asistentes sociales y miembros de las oficinas de empleo. Todos ellos trabajarán de forma conjunta para seleccionarlos y encontrarles, de acuerdo con sus facultades, una colocación.

Garante municipal

"Los trabajos pueden ser en todos los campos, desde tareas administrativas a empleos en fábricas o en la construcción, dependiendo de la formación y las cualidades que tengan los muchachos acogidos", explica Joosten.El portavoz municipal no cree que las empresas vayan a poner grandes dificultades por el hecho de que se trate de pequeños criminales. Cuenta para ello con la conocida tolerancia holandesa para resolver los problemas sociales y también, de una u otra manera, con el hecho de que el Ayuntamiento actúa de garante.

En el proyecto pueden participar también jóvenes que, a juicio de la comisión, estén en situación familiar o personal que amenace con arrastrarles a ambientes criminales.

Las autoridades locales cuentan, de partida, con que una mayoría de los participantes proceda de minorías étnicas. Y reconocen la necesidad de que los jóvenes tengan voluntad de cooperar. "Sin su ayuda no podemos lograr nada, pero de los sondeos que hemos realizado se puede deducir ya que la mayoría de los jóvenes delincuentes menores tienen ganas de participar", asegura el portavoz Joosten.

La medida ha sido aprobada por el Ayuntamiento -donde gobierna una coalición de los tres principales partidos, más los Verdes- sin ninguna oposición vecinal ni política.