Las cintas incautadas en el piso del Cesid de Vitoria están borradas

La juez Carmen Lasanta, que investiga las escuchas descubiertas el pasado 31 de marzo en la sede de Herri Batasuna en Vitoria, visionó ayer las 14 cintas de video halladas en la vivienda donde estaba instalado el dispositivo de vigilancia.La instructora permitió igualmente a los representantes de la defensa y la acusación particular que inspeccionasen todo el material técnico que se incautó durante el registro del piso situado sobre el local de la coalición radical.

Las cintas, de cuatro horas de duración cada una, no contenían imagen o sonido alguno y, a falta de peritaje técnico, dan ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La juez Carmen Lasanta, que investiga las escuchas descubiertas el pasado 31 de marzo en la sede de Herri Batasuna en Vitoria, visionó ayer las 14 cintas de video halladas en la vivienda donde estaba instalado el dispositivo de vigilancia.La instructora permitió igualmente a los representantes de la defensa y la acusación particular que inspeccionasen todo el material técnico que se incautó durante el registro del piso situado sobre el local de la coalición radical.

Las cintas, de cuatro horas de duración cada una, no contenían imagen o sonido alguno y, a falta de peritaje técnico, dan la impresión de haber sido grabadas y borradas para usos sucesivos. Entre los aparatos técnicos incautados en la vivienda, ocupada por agentes del servicio secreto Cesid, se encuentra un router, aparato destinado a la transmisión de datos, capaz de hacer llegar a direcciones predeterminadas tanto textos, como sonido e imágenes.

De la existencia de este aparato cabe deducir, según fuentes jurídicas, que el piso pudo ser utilizado sólo para la realización de escuchas y eventuales filmaciones, transmitidas regularmente por ese medio a su destino final. Este método haría superflua la conservación de las cintas grabadas.

El router estaba estaba conectado a una docena de aparatos, supuestamente destinados a las grabaciones, pero cuya utilidad y procedencia exacta deberán determinar expertos en comunicaciones, ya que carecen de toda identificación de marca, modelo o lugar de fabricación y, al parecer, no se comercializan.

La falta de cintas grabadas entre el material incautado supone una dificultad para demostrar que desde el piso del Cesid se interceptaban y grababan reuniones o conversaciones de HB. El ministro de Defensa, Eduardo Serra, reconoció en el Congreso que el servicio secreto disponía de una "instalación técnica" en el piso de Vitoria, pero eludió concretar si la misma había sido o no utilizada. La línea de defensa de los imputados será, previsiblemente, la de negar que el sistema hubiese sido activado y, en consecuencia, que se produjera la interceptación de comunicaciones.

La juez de Vitoria está a la espera de que el Consejo de Ministros conteste su petición de que se desclasifiquen todos los datos relaciones con la operación de espionaje a HB.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

El propio director del Cesid, Javier Calderón, manifestó el miércoles en Cuenca que "existe el riesgo de poner en peligro la seguridad nacional" si se desclasifican determinadas informaciones. Fuentes gubernamentales indicaron que el Consejo de Ministros decidirá antes de las vacaciones su respuesta a la juez y que ésta será negativa.

Por otra parte, el responsable del Cesid en Pamplona (Navarra), el comandante de Ingenieros P. T. N., ha sido relevado del cargo, según informó ayer el diario Deia.

Archivado En