Cartas al director

Me siento orgulloso

Hoy hace más de 21 años desde que naciera EL PAÍS, me decido a escribirle para brindarle el resultado de esta larga etapa como lector anónimo y fiel coleccionista de sus páginas, entresacadas a lo largo de todo este trayecto, a modo de hemeroteca depurada y que recoge temáticamente un fichero global de este periodo crucial del fin de siglo.Sentí, desde el primer mo-Pasa a la página siguiente

Viene de la página anterior mento de su lectura, no sólo la emoción de asistir desde fuera al despegue de un genuino órgano de expresión, sino la necesidad imperiosa de no deshacerme d...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Hoy hace más de 21 años desde que naciera EL PAÍS, me decido a escribirle para brindarle el resultado de esta larga etapa como lector anónimo y fiel coleccionista de sus páginas, entresacadas a lo largo de todo este trayecto, a modo de hemeroteca depurada y que recoge temáticamente un fichero global de este periodo crucial del fin de siglo.Sentí, desde el primer mo-Pasa a la página siguiente

Viene de la página anterior mento de su lectura, no sólo la emoción de asistir desde fuera al despegue de un genuino órgano de expresión, sino la necesidad imperiosa de no deshacerme de los ejemplares leídos sin antes haber recortado los artículos y noticias que me parecían más importantes. Rescatando pacientemente esos testimonios presentía que con el paso del tiempo llegarían a ser, para mí y para mis hijos, un valioso archivo de documentación y un auténtico placer intelectual.

Hoy, por fin, he conseguido clasificar adecuadamente toda esa mesa de papel y me siento orgulloso: mucho más que una cuidada hemeroteca, dispongo del latido diario y el termómetro de una de las aventuras culturales que más engrandecen este recorrido histórico, ante el crisol de un medio de expresión que ha ido más allá, ejerciendo, como Aranguren lo definió, de "intelectual colectivo" imprescindible.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

A ese simple papel de fiel lector de prensa, de testigo mudo y pasivo del acontecer diario de nuestra actualidad, he conseguido darle otra dimensión: me queda la huella escrita de un fiel compañero de viaje de esta parte de mi vida y el filtro personal de su lectura, al que podré volver, siempre que quiera, como autor de mi memoria.

Éste es el resultado: 22 libros encuadernados y 40 archivadores. Están todos los suplementos culturales aparecidos con distintos nombres a lo largo de todo este tiempo. Hay 70 archivos temáticos y 22 archivos biográficos.

Aun sabiendo que existen lectores con el mismo entusiasmo, con similares archivos y, además, las bases de datos para acceso informático, he querido ponerlo en su conocimiento y en el de los lectores..

Archivado En