Tribuna:

Desajustes

La Bolsa española ha reanudado la actividad con una sesión llena de alternativas y en la que al final se ha impuesto la presencia de dinero. Para algunos observadores esta jornada "ha cerrado en falso", puesto que aprovechó la apertura de Wall Street para ganar posiciones y después se mantuvo al alza gracias al apoyo de muy pocos valores. Este desfase era más evidente en el mercado de futuros, en el que el precio de los contratos para el primer vencimiento quedaba casi 50 puntos por debajo del contado, pero el contraste fue más evidente cuando la Bolsa de Nueva York se orientó a la baja al ten...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La Bolsa española ha reanudado la actividad con una sesión llena de alternativas y en la que al final se ha impuesto la presencia de dinero. Para algunos observadores esta jornada "ha cerrado en falso", puesto que aprovechó la apertura de Wall Street para ganar posiciones y después se mantuvo al alza gracias al apoyo de muy pocos valores. Este desfase era más evidente en el mercado de futuros, en el que el precio de los contratos para el primer vencimiento quedaba casi 50 puntos por debajo del contado, pero el contraste fue más evidente cuando la Bolsa de Nueva York se orientó a la baja al tener en cuenta la versión más negativa de los últimos indicadores económicos publicados en Estados Unidos. Para los inversores norteamericanos el nuevo dato del índice de tendencia, que redondea un año completo de subidas, es otra cifra que apuntala las tensiones inflacionistas, al igual que el récord en ventas de viviendas nuevas conseguido en el pasado mes de abril. Mientras que los inversores españoles no retiran el dinero de la Bolsa porque no saben dónde colocarlo después, en Estados Unidos la buena marcha de la economía ofrece numerosas alternativas que explican los altibajos de la Bolsa en las últimas semanas. Al final de la sesión, el Dow Jones bajó 31,13 puntos, es decir, el 0,35%, con lo que mantenía la incertidumbre a corto plazo para el conjunto de los mercados europeos, aunque en esta sesión ninguno de ellos sufrió recortes.

Más información

Otro dato en contra de la reacción de la Bolsa en la fase final de esta jornada estuvo en el mercado de deuda, en el que los precios se orientaron a la baja. La rentabilidad de la emisión a 10 años subió hasta el 5,04%, desde el 5,02% del lunes, mientras que el diferencial con Alemania seguía en 0,19 puntos, es decir, se mantiene en la zona alta en la que se ha situado en las últimas semanas. El Tesoro mantuvo la rentabilidad a 10 años en la subasta de ayer en el 5,05%, el nivel que el mercado secundario dictó a lo largo de toda la mañana y que sólo en los minutos finales se corrigió ligeramente.

Archivado En