Amor de legionario

Y después de varios días de ensayo, resucitaron. Lo hicieron entre banderas de España y sonido de botas al grito de "firmes". El tercio Alejandro Farnesio de la Legión conmemoró ayer en Ronda, "en estrecho hermanamiento con los pueblos de la Serranía", el día de las Fuerzas Armadas. Y es que los novios de la muerte se han convertido en parte del paisaje en los 16 años que llevan instalados en esa localidad. "Ya no son los legionarios de antes. Hasta hubo gente que protestó cuando corrió el rumor de que los iban a desplazar", dijo la dueña de un puesto de helados antes de que comenzasen a desfi...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Y después de varios días de ensayo, resucitaron. Lo hicieron entre banderas de España y sonido de botas al grito de "firmes". El tercio Alejandro Farnesio de la Legión conmemoró ayer en Ronda, "en estrecho hermanamiento con los pueblos de la Serranía", el día de las Fuerzas Armadas. Y es que los novios de la muerte se han convertido en parte del paisaje en los 16 años que llevan instalados en esa localidad. "Ya no son los legionarios de antes. Hasta hubo gente que protestó cuando corrió el rumor de que los iban a desplazar", dijo la dueña de un puesto de helados antes de que comenzasen a desfilar. Los tatuajes con el emblema de la Legión (la pica, ballesta y arcabuz) ya no son tan frecuentes. "Creo que las misiones de paz en las que hemos participado han contribuido a cambiar la mala imagen que teníamos", aseguraba un legionario. Y no sólo él lo cree. Tras el izado de la bandera de España, las 21 salvas de ordenanza, y después de que un niño se echase a llorar, las divisiones que estuvieron presentes en Bosnia y Albania recibieron una condecoración por su labor. No fueron los únicos homenajeados. Los legionarios hicieron tributo a su nombre y rindieron honor con una corona a los "que dieron su vida por España". O como lo dijo el capellán en oración con tono militar: "A los que no quisieron amar a otra bandera. No quisieron andar otro camino. No supieron morir de otra manera". Los civiles también pudieron participar. Y no sólo con sus aplausos al paso del desfile que puso punto final. Dos ancianos, dos niños y dos goyescas portaron la bandera de España, que fue izada a espaldas del Cristo de la Buena Muerte, en la Alameda del Tajo. Silencio total. Vivas reglamentarios. La canción del Legionario y todos a marchar. 700 soldados recorrieron las calles Jerez y Virgen de la Paz. Los cañones antiaéreos, los misiles contracarros y las mulas mecánicas dieron un aire de película futurista al acto, de Mad Max. ¿Por qué aplauden? "Pues porque son legionarios", contesta una mujer con una niña en brazos. No hay que explicar más. Sólo añade: "Mira. Ahí está papá". Al igual que ella, cerca de 6.000 personas, según la Policía Local, observaron a los novios de la muerte marchar: unos a pie y otros motorizados, pero todos al son marchas militares y con el mentón bien alto. Un turista australiano contemplaba enajenado el desfile. "¿Es algún día nacional o algo así? En mi país un acto militar no tendría tanto éxito. Será porque perdimos demasiados soldados en la primera guerra mundial", asegura. A los rondeños no les parece mal. "Está muy bien, muy bien", comentaba un anciano y sus amigos asentían. La pregunta de un niño de seis años encontró ayer la respuesta. "¿Qué es un desfile?". "Es ir andando rápido", contesta. "Ah, una carrera". Mientras, en Almería, el desfile de la Legión provocó más discrepancias. La instalación de la Brigada Legionaria en Viator se está traduciendo en "una creciente militarización de la sociedad" que preocupa sensiblemente a Los Verdes, informa Tereixa Constenla. La asamblea local de Almería reaccionó ayer ante el bando emitido por el alcalde Juan Megino, mediante el que animaba a los almerienses a participar en los actos organizados por el Ejército, con pesar: "Lamentamos que ponga más empeño en introducir los valores propios del Ejército entre la población que en hacer más habitable la ciudad". Los Verdes animaban a la población a aprovechar el Día de las Fuerzas Armadas con excursiones por la naturaleza. Cerca de 1.300 soldados participaron ayer en el desfile militar, que se celebró en el Paseo de Almería.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En