Aznar reconoce que el funcionamiento de la justicia es deficiente en España
El presidente del Gobierno, José María Aznar, manifestó ayer, en el curso de una conferencia pronunciada en el Instituto de Estudios Económicos de la Empresa (IESE), que la justicia española presenta serias deficiencias. La conferencia de Aznar en el IESE fue seguida por más de 600 personas entre empresarios y académicos. El presidente, que ayer visitó las instalaciones de Mediaparc en Barcelona, almorzó con un grupo de intelectuales catalanes en el domicilio del arquitecto Óscar Tusquets.
A propósito del mal funcionamiento de la justicia, el presidente de Gobierno señaló ante los 600 e...
El presidente del Gobierno, José María Aznar, manifestó ayer, en el curso de una conferencia pronunciada en el Instituto de Estudios Económicos de la Empresa (IESE), que la justicia española presenta serias deficiencias. La conferencia de Aznar en el IESE fue seguida por más de 600 personas entre empresarios y académicos. El presidente, que ayer visitó las instalaciones de Mediaparc en Barcelona, almorzó con un grupo de intelectuales catalanes en el domicilio del arquitecto Óscar Tusquets.
A propósito del mal funcionamiento de la justicia, el presidente de Gobierno señaló ante los 600 empresarios y académicos que asistieron ayer al acto de IESE que "la responsabilidad debe pedírsele sobre todo a los jueces y magistrados". Aznar destacó que la entrada en el euro representa un gran momento de la economía española en este siglo, comparable en trascendencia al Plan de Estabilización de 1957 y a la entrada en la Unión Europea en 1986. En un momento de su conferencia, Aznar, recurrió a la expresión castiza "¡que no decaiga!" para animar a los empresarios catalanes a que continúen proponiendo ideas que aporten prosperidad y bienestar a la economía española y no se acomoden una vez superado el examen del euro. En el curso de su ponencia en el IESE, el presidente del Gobierno deslizó opiniones contrarias al conformismo en un momento como el actual, con un marco macroeconómico brillante, y dijo que el mejor antídoto para la tentación del gasto es "una llamada a José Barea, el director de la Oficina Presupuestaria".