Dos médicos de Castellón serán juzgados por un aborto de 1992

Sáenz de Santamaría y el personal de su clínica malagueña no son los únicos que se enfrentan a un proceso judicial por un aborto. Dos médicos de las clínicas Acuario y Mediterránea Médica, las únicas acreditadas en Castellón para practicar abortos, están al borde del banquillo por un caso similar ocurrido en 1992. El fiscal les acusa además de un delito de lesiones. Si sus peticiones son atendidas por el juez de la Audiencia Provincial que instruye el caso, con ellos se sentarán la mujer que abortó y su novio. Javier Vives-Adell y José Luis Carbonell llevan seis años esperando el juicio. El ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Sáenz de Santamaría y el personal de su clínica malagueña no son los únicos que se enfrentan a un proceso judicial por un aborto. Dos médicos de las clínicas Acuario y Mediterránea Médica, las únicas acreditadas en Castellón para practicar abortos, están al borde del banquillo por un caso similar ocurrido en 1992. El fiscal les acusa además de un delito de lesiones. Si sus peticiones son atendidas por el juez de la Audiencia Provincial que instruye el caso, con ellos se sentarán la mujer que abortó y su novio. Javier Vives-Adell y José Luis Carbonell llevan seis años esperando el juicio. El juzgado de instrucción número 6 de Castellón abrió el caso en 1992. Una mujer que había abortado en la clínica Acuario fue ingresada de urgencia en el Hospital General. El médico que la atendió emitió un parte de lesiones -"perforación del útero", según el escrito del fiscal- que dio pie a la investigación judicial.

El personal de Acuario y su abogado, Virgilio Lázaro, creían que el juicio se celebraría "por fin" este mes, pero aún no se les ha notificado. Lo que sí saben ya son las penas que pide para ellos el fiscal: 1 año de cárcel y cuatro de inhabilitación para cada uno de los médicos y una multa para la mujer y su novio.

Sobre la firma

Archivado En