Desvalijada la residencia del representante de la Orden de Malta
La residencia oficial del embajador de la Orden de Malta en Madrid, el conde Fernando Orssich, fue desvalijada la noche del pasado 2 de febrero. Los ladrones se llevaron, según Orssich, joyas y documentos privados, entre ellos su propio testamento y un talonario de cheques. Para acceder a la vivienda, situada en la Ronda de la Abubilla (Conde de Orgaz), pasaron por la casa de un vecino, cortaron una verja, atravesaron un jardín y accedieron por la ventana al dormitorio principal. "Posiblemente fueron dos y se subió uno encima de otro", señaló el embajador.Una vez dentro, revolvieron la habitac...
La residencia oficial del embajador de la Orden de Malta en Madrid, el conde Fernando Orssich, fue desvalijada la noche del pasado 2 de febrero. Los ladrones se llevaron, según Orssich, joyas y documentos privados, entre ellos su propio testamento y un talonario de cheques. Para acceder a la vivienda, situada en la Ronda de la Abubilla (Conde de Orgaz), pasaron por la casa de un vecino, cortaron una verja, atravesaron un jardín y accedieron por la ventana al dormitorio principal. "Posiblemente fueron dos y se subió uno encima de otro", señaló el embajador.Una vez dentro, revolvieron la habitación y se quedaron con una pequeña caja de caudales. Ésta fue hallada posteriormente en la carretera de Burgos, donde los ladrones la abandonaron tras quitarle los objetos de valor que contenía. El monto de este robo asciende, según Orssich, a unas 245.000 pesetas. Hasta la fecha no se han registrado detenciones por este caso.
Este no es el único caso de asalto a una sede oficial de instituciones extranjeras en Madrid. El pasado domingo le tocó el turno a la Embajada de la India. Los ladrones, tras forzar las cerraduras de la puerta principal, entraron en la legación diplomática y robaron 116 pasaportes españoles en la sección consular, posiblemente con el fin de venderlos en el mercado negro, donde su cotización es alta.
"Iban a por los documentos; de lo contrario, se hubiesen llevado más bienes", señaló ayer una fuente policial, quien destacó las escasas medidas de seguridad adoptadas por la sede diplomática.
La policía, una vez denunciado el robo, alertó a la Interpol para que activase los controles de fronteras con el objetivo de evitar el uso fraudulento de los documentos.