El Papa beatifica a una monja española y a un "mártir del estalinismo"
La religiosa española Carmen Sallés y Barangueras, nacida en 1848 en la localidad catalana de Vic, fue beatificada ayer por el Papa Juan Pablo II en una solemne ceremonia celebrada en la basílica de San Pedro del Vaticano. Sallés, fallecida en 1911, fue fundadora de las Concepcionistas misioneras de la Enseñanza, una orden dedicada a promover la educación cristiana de niñas y jóvenes que posee escuelas en 12 países. El presidente del Senado, Juan Ignacio Barrero, estuvo presente en la ceremonia.También fue elevado al mismo grado de santidad el obispo búlgaro Eugenio Bossilkov, condenado a muer...
La religiosa española Carmen Sallés y Barangueras, nacida en 1848 en la localidad catalana de Vic, fue beatificada ayer por el Papa Juan Pablo II en una solemne ceremonia celebrada en la basílica de San Pedro del Vaticano. Sallés, fallecida en 1911, fue fundadora de las Concepcionistas misioneras de la Enseñanza, una orden dedicada a promover la educación cristiana de niñas y jóvenes que posee escuelas en 12 países. El presidente del Senado, Juan Ignacio Barrero, estuvo presente en la ceremonia.También fue elevado al mismo grado de santidad el obispo búlgaro Eugenio Bossilkov, condenado a muerte y ejecutado en 1952, en plena guerra fría por el régimen estalinista de Sofía. Es la primera vez que la Iglesia católica eleva a los altares -siquiera en calidad de beato- a un mártir de los países ex comunistas del Este de Europa. Bossilkov (1900-1952) fue torturado y fusilado por negarse a aceptar una ley especial que sellaba la separación de la comunidad católica búlgara de la Santa Sede.
La tercera nueva beata es una religiosa del siglo XVII, la italiana Brígida Morello de Jesús, nacida en Rapallo (Liguria) en 1610 y fallecida en 1679, que fundó en 1649 de las Hermanas Ursulinas de María Inmaculada.