El Gobierno venderá por adjudicación directa el 30% que le queda en Retevisión

El Estado se desprenderá del 30% que posee en Retevisión mediante adjudicación directa a uno o vanos inversores privados y no mediante una oferta pública de venta de acciones (OPV) o concurso, según adelantó ayer Anna Birulés, consejera-directora general de la compañía de teléfonos. "El Ministerio de Fomento ya ha valorado el proceso y lo hará por el procedimiento de adjudicación directa", precisó Birulés.

El valor de la participación pública en el segundo operador es de, al menos, 70.000 millones de pesetas, de acuerdo con el precio que se pagó por el 70% en el concurso para su pri...

El Estado se desprenderá del 30% que posee en Retevisión mediante adjudicación directa a uno o vanos inversores privados y no mediante una oferta pública de venta de acciones (OPV) o concurso, según adelantó ayer Anna Birulés, consejera-directora general de la compañía de teléfonos. "El Ministerio de Fomento ya ha valorado el proceso y lo hará por el procedimiento de adjudicación directa", precisó Birulés.

El valor de la participación pública en el segundo operador es de, al menos, 70.000 millones de pesetas, de acuerdo con el precio que se pagó por el 70% en el concurso para su privatización. Fuentes financieras apuntan que en la actualidad, el precio puede alcanzar los 100.000 millones.

El ministro de Fomento, Rafael Arias Salgado, adelantó la semana pasada la convocatoria inminente de un concurso para elegir al asesor en la privatización total de Retevisión.

Con todo, la operación está condicionada, por las negociaciones entre la eléctrica Endesa, uno de los principales accionistas de Retevisión, y el Banco Central Hispano (BCH), que desea tomar, al menos, un 10% de la operadora.

Por otra parte, la autoridad reguladora de las telecomunicaciones en Alemania aprobó ayer una reducción, de tarifas de Deutsche Telekom, que entrará en vigor el 1 de marzo. Los nuevos precios, que implican rebajas de hasta el 45% en las llamadas internacionales, supondrán un ahorro de unos 2.000 millones de marcos (168.000 millones de pesetas) para los usuarios.