Ingeniería

Una de las próximas obras de ingeniería del señor Manzano (con el consentimiento de la Comunidad de Madrid y del Ministerio de Fomento) es la construcción de una autovía que mejore las actuales saturaciones de tráfico de la carretera de Boadilla del Monte, en pleno barrio de Campamento. La construcción de dicha autovía (que si nadie lo remedia será una realidad en breve) supondrá una perturbación constante en el barrio, así como un daño irreparable en nuestro único pulmón verde, la Casa de Campo.En el proyecto no se tiene en cuenta que la construcción de dicha carretera su...

Una de las próximas obras de ingeniería del señor Manzano (con el consentimiento de la Comunidad de Madrid y del Ministerio de Fomento) es la construcción de una autovía que mejore las actuales saturaciones de tráfico de la carretera de Boadilla del Monte, en pleno barrio de Campamento. La construcción de dicha autovía (que si nadie lo remedia será una realidad en breve) supondrá una perturbación constante en el barrio, así como un daño irreparable en nuestro único pulmón verde, la Casa de Campo.En el proyecto no se tiene en cuenta que la construcción de dicha carretera supondrá la invasión de parte de la Casa de Campo (en concreto, se destruirá parte del Arroyo Meaques), además de acabar con la única zona deportiva del barrio:, un pequeño campo de fútbol-sala, una humilde cancha de baloncesto y una pista para bicicletas construida con el esfuerzo de los jóvenes. Tampoco se tiene en cuenta los peligros que ocasionará la bendita autovía: continuos accidentes de tráfico por exceso de velocidad, robos constantes (ya que para acceder a la Casa de Campo supongo que se tendría que construir un paso subterráneo), ruidos de motores (que nos impidan a los estudiantes tener las ventanas abiertas en verano), aire irrespirable... Además, no debemos olvidarnos dela enorme pérdida de valor de nuestros pisos a la hora de una posible venta.

En fin, somos muchos los jóvenes de este barrio (por no decir todos) que estamos en contra de este proyecto y como jóvenes debemos hacernos oír y pedir al ingeniero Manzano que tenga más en cuenta a los barrios obreros y trabajadores como Campamento y que, como consecuencia, no lleve a efecto tal proyecto, ya que de lo contrario cometería un grave atentado ecológico y humano.

Lo único que le pediría al señor Manzano es que se preocupe de cosas más importantes para nuestra ciudad (¡que hay que ver cómo la tiene!) y se deje de tanto asfalto.

Cómo se nota que el señor Manzano no vive en Campamento...-