Sobre la UNED

Después de muchísimos Gobiernos conservadores de carácter absolutista, llevamos disfrutando veinte años de democracia occidental, en gran medida gracias a periódicos como EL PAÍS, donde hemos aprendido, desde el primer número, a pensar, a ser libres, tolerantes y solidarios.Ahora que se cumple su 25º aniversario, me sigue llamando la atención el nombre de la UNED, por lo que significa la D de distancia. Se creó por decreto del 18 de agosto de 1972, en cuyo proyecto se definía como "universidad libre" porque se pretendía acoger en ella alumnos de enseñanza libre de todas las unive...

Después de muchísimos Gobiernos conservadores de carácter absolutista, llevamos disfrutando veinte años de democracia occidental, en gran medida gracias a periódicos como EL PAÍS, donde hemos aprendido, desde el primer número, a pensar, a ser libres, tolerantes y solidarios.Ahora que se cumple su 25º aniversario, me sigue llamando la atención el nombre de la UNED, por lo que significa la D de distancia. Se creó por decreto del 18 de agosto de 1972, en cuyo proyecto se definía como "universidad libre" porque se pretendía acoger en ella alumnos de enseñanza libre de todas las universidades, pero Carrero Blanco rechazó tan ambiciosa definición por considerarla políticamente "excitante", por no utilizar otras calificaciones de carácter antidemocrático.

Está sobradamente demostrado que ninguna universidad forma lo suficiente como para trabajar inmediatamente después del diploma, entre otras razones porque más del 75% de los textos solo es paja que nos obligan a comprar y empollar. La UNED tampoco, aunque en muchos casos el mayor porcentaje de los que aprueban oposiciones pertenecen o han sido alumnos de la UNED.

Es sobradamente sabido que en esta universidad se matriculan alumnos que trabajan o que por su avanzada edad se ven obligados a ser sumamente responsables, pero el régimen académico obliga a preparar siempre el programa completo de cada asignatura, sin que sea determinante la nota obtenida en algún parcial a que pudiera someter cualquier tutoría, y mucho menos poder mejorar la nota en aquellas asignaturas relacionadas con su trayectoria laboral debidamente certificada.

Creo que estos alumnos se encuentran en absoluta desventaja frente a los compañeros de la enseñanza presencial, que, como es sabido, en la mayor parte de las facultades disponen de muchas más horas de clase y no tienen que preparar el programa completo.

Sin embargo, cuando obtienen el diploma deparado disponible sólo aspiran a dirigir la empresa, sin preocuparse de la experiencia profesional, aunque conocemos honrosas y, loables excepciones. Además, muchos de esos alumnos han estudiado en universidades privadas, donde el aprobado lo tienen prácticamente asegurado.

Por tanto, creo que va siendo hora de cambiar lo de "a distancia" por "libre" y reformar el régimen académico de la UNED, ya que pagamos el mismo importe de matrícula y, nos examinamos en junio y septiembre, como todo el mundo.-