Entrevista:

"La gente del sur sabe conservar el interés por todo"

Ángela Monleón nació en Madrid hace 36 años, pero, entre el padre valenciano, la madre santanderina o los ancestros árabes y judíos, se tiene por perfecta mestiza. Lo suyo, dice, es proclamar "el derechol a entenderse con todo el mundo." un chisporroteante espíritu vitalista y cosmopolita que parece heredado de su padre, José Monleón, director del Instituro Internacional de Teatro del Mediterráneo y del Festival Madrid Sur. Ayer arrancó la segunda edición del certamen con El foc del mar, de Xarxa Teatre (Fuenlabrada), y Piratas, corsarios, de Morboria Teatro (Parla y Getafe),...

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Ángela Monleón nació en Madrid hace 36 años, pero, entre el padre valenciano, la madre santanderina o los ancestros árabes y judíos, se tiene por perfecta mestiza. Lo suyo, dice, es proclamar "el derechol a entenderse con todo el mundo." un chisporroteante espíritu vitalista y cosmopolita que parece heredado de su padre, José Monleón, director del Instituro Internacional de Teatro del Mediterráneo y del Festival Madrid Sur. Ayer arrancó la segunda edición del certamen con El foc del mar, de Xarxa Teatre (Fuenlabrada), y Piratas, corsarios, de Morboria Teatro (Parla y Getafe), y Monleón hija, desde la coordinación general de la muestra, confesaba su entusiasmo salpicado de nervios...Pregunta. ¿Qué descubrió la temporada pasada en nuestro sur metropolitano?

Respuesta. Sobre todo, un material humano sorprendente. La gente del sur es joven en el sentido más amplio de la palabra y ha sabido conservar el interés por las cosas, la curiosidad y el respeto. Saben disfrutar y asombrarse; aquí, en Madrid, somos unos aburridos.

P. Con osadías como la de ofrecer teatro en ruso en Leganés, ¿llegaron a temer un monumental patinazo?

R. Algún temor nos ha asaltado, pero es que esto de coordinar seis ayuntamientos no es sencillo. Pese a todo, hemos conservado esa inconsciencia lúcida de estar un poco locos y creer en lo que hacemos. Y eso termina por diluir no pocas dificultades.

P. Móstoles, Leganés, Getafé, Fuenlabrada, Alcorcón y Parla llevan muchos años elucubrando con servicios mancomunados. ¿Saben que este festival es la primera materialización de esa idea?

R. Es que desde la cultura se pueden hacer cosas que en política resultan complicadas. En el Instituto hemos conseguido sentar. en una mesa a serbios y croatas, a israelíes y palestinos. ¿Cómo no lo íbamos a conseguir con un señor de Móstoles y otro de Leganés? Una persona culta es sensible, no se va a liar a tiros con nadie; a partir de ahí, los políticos pueden aprovechar esos espacios comunes.

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P. Madrid Sur, aún tan jovenzuelo, ¿cuenta con sus propias señas de identidad?

R. Cuenta, al menos, con una lógica interna. Cada espectáculo tiene un cuento detrás, un porqué para estar donde está. Todas estas obras se preguntan por el mundo y por el ser humano. Y en todas hacemos viajar al espectador por el Mediterráneo: para que comprenda que siempre hay un sur más allá del sur.

P. ¿Conseguirán de una vez que un señor de Madrid se plantee acudir a un espectáculo a Móstoles?

R. Ya lo estamos consiguiendo. En el teléfono de información (355 58 67) nos fríen a llamadas para preguntarnos, por ejemplo, cómo se va a. Leganés. Yo les recomiendo siempre el Cercanías.

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