Propuesta más tímida
Si los planes para el reino de Escocia - cuyo Parlamento se unió al de Inglaterra en el año 1707- se consideran revolucionarios, la propuesta galesa peca, por el contrario, de cierta timidez.Cardiff no podrá legislar ni alterar la tasa central de impuestos, sino simplemente distribuir los 7.000 millones de libras anuales. que recibe actualmente de Londres.
En contrapartida, se democratizan los quangos, organismos oficiales designados por el Gobierno, y se abre el camino para reforzar la Asamblea cuando el electorado así lo desee. "Devolución" aclaró Ron Davies, ministro para Gale...
Si los planes para el reino de Escocia - cuyo Parlamento se unió al de Inglaterra en el año 1707- se consideran revolucionarios, la propuesta galesa peca, por el contrario, de cierta timidez.Cardiff no podrá legislar ni alterar la tasa central de impuestos, sino simplemente distribuir los 7.000 millones de libras anuales. que recibe actualmente de Londres.
En contrapartida, se democratizan los quangos, organismos oficiales designados por el Gobierno, y se abre el camino para reforzar la Asamblea cuando el electorado así lo desee. "Devolución" aclaró Ron Davies, ministro para Gales, "es un proceso, no un acontecimiento".