El Defensor del Pueblo investiga el cerco policial a los poblados

El cerco que la policía estableció durante toda la semana pasada en torno a los poblados marginales del sur para impedir el tráfico de droga y la posible situación de desamparo que sufrieron los drogadictos ha provocado la intervención del defensor del pueblo, Fernando Álvarez de Miranda. La institución ha solicitado información de la operación efectuada en La Celsa, Cerro de la Mica, Torregrosa y Los Pitufos. El delegado del Gobierno en Madrid, Pedro Núñez Morgades, y el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Gonzalo Robles, deberán aportar detalles de la "impermeabilizació...

El cerco que la policía estableció durante toda la semana pasada en torno a los poblados marginales del sur para impedir el tráfico de droga y la posible situación de desamparo que sufrieron los drogadictos ha provocado la intervención del defensor del pueblo, Fernando Álvarez de Miranda. La institución ha solicitado información de la operación efectuada en La Celsa, Cerro de la Mica, Torregrosa y Los Pitufos. El delegado del Gobierno en Madrid, Pedro Núñez Morgades, y el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Gonzalo Robles, deberán aportar detalles de la "impermeabilización policial" llevada a cabo por los agentes para impedir la adquisición de estupefacientes.El Defensor del Pueblo analizará las informaciones de la operación policial, en las que, "al parecer, no se pudo contar con la suficiente cobertura de asistencia sanitaria para atender a los drogadictos, que se encontraron en una situación grave de síndrome de abstinencia", según una nota oficial.

El blindaje policial en los poblados marginales se saldó, según Gonzalo Robles, con 50 detenidos y la confiscación de 65 kilos de heroína. "Además de la detención de traficantes, la operación perseguía captar a ese grupo de drogadictos duros que llevan entre 15 y 20 años drogándose y se encuentran en una situación de deterioro muy gande", aseguró Robles. "Se ha logrado que algunos de ellos acudieran a las urgencias de los hospitales, poniéndose en contacto por primera vez con un centro sanitario, donde se les ha podido hacer un reconocimiento médico para posteriormente poderles derivar, con su consentimiento, a un centro asistencial", agregó.

Errores

El alcalde José María Álvarez del Manzano reconoció ayer a Europa Press que se cometió algún error en el cerco policial. Para el regidor, habría sido conveniente que las unidades sanitarias distribuyeran metadona entre los drogadictos que acudían a comprar droga para evitar los disturbios del pasado viernes, cuando unos 300 drogadictos, exasperados por la carestía de la heroína, se enfrentaron a la policía.El grupo municipal socialista criticó la falta de coordinación del Ayuntamiento y la Delegación del Gobierno durante la operación antidroga. "Así no se soluciona el problema de la droga", subrayó la concejal socialista Patrocinio de las Heras. "Con esta actuación se ha incrementado la demanda de metadona, las papelinas son más caras y existe una mayor inseguridad ciudadana". El PSOE reclama la convocatoria urgente del Consejo de Seguridad Ciudadana y de la Comisión Antidroga.

La oposición regional censuró el cerco policial por no tener en cuenta a los drogodependientes. "Estos enfermos necesitan algo más que acciones policiales. Hay que llevar a cabo tratamientos específicos", apuntó Juan Ramón Sanz, de IU.