Acuerdo para combatir la corrupción

El Consejo de Ministros de la OCDE adoptó ayer, formalmente, un acuerdo para luchar contra la corrupción en las transacciones económicas internacionales. Según el acuerdo, los Estados miembros deberán proponer antes del 1 de abril de 1998 las medidas legislativas necesarias para que sean perseguidos los funcionarios que cobren comisiones o utilicen el soborno.Los ministros de la OCDE han decidido, además, iniciar lo más rápidamente posible una convención internacional para armonizar la criminalización de este tipo de comportamientos. Los resultados de esa convención deberán ser ratificados a f...

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El Consejo de Ministros de la OCDE adoptó ayer, formalmente, un acuerdo para luchar contra la corrupción en las transacciones económicas internacionales. Según el acuerdo, los Estados miembros deberán proponer antes del 1 de abril de 1998 las medidas legislativas necesarias para que sean perseguidos los funcionarios que cobren comisiones o utilicen el soborno.Los ministros de la OCDE han decidido, además, iniciar lo más rápidamente posible una convención internacional para armonizar la criminalización de este tipo de comportamientos. Los resultados de esa convención deberán ser ratificados a finales de 1997, para que entren en vigor, como muy tarde, un año después. De esta manera, los Estados miembros tendrán todo el año 1998 para introducir en sus legislaciones los resultados de esa convención.

Más información

El acuerdo adoptado ayer recomienda una serie de normas contables, de verificación externa y controles internos de las sociedades, con el fin de evitar que se paguen comisiones o se incurra en prácticas de corrupción. Se entiende por "corrupción" la promesa o la concesión de un pago indebido o de otras ventajas a un agente público para su provecho o el provecho de terceros, directamente o a través de intermediarios, para influir en un agente público y en sus funciones oficiales con el objetivo de obtener o conservar un mercados.

El vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato, mostró ayer su satisfacción por este acuerdo y por el hecho de que sea una convención internacional la que oriente los cambios legislativos necesarios en algunos países.

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