El "jefe" de la derecha
Dos semanas después de la disolución de la Asamblea Nacional, Chirac interviene en la campana para recordar a los franceses que espera su voto de confianza. Tal es la palabra clave que escribe en la tribuna enviada a 14 diarios regionales. Es cierto que la confianza de la que habla el presidente es, ante todo, "la que se da a los demás la que uno tiene en su interior", pero se entiende que cuando invita a sus lectores a "no tener miedo a los cambios" es a la política llevada, a cabo estos últimos años bajo su autoridad y a la que pretende realizar en el futuro a la que les invita a susc...
Dos semanas después de la disolución de la Asamblea Nacional, Chirac interviene en la campana para recordar a los franceses que espera su voto de confianza. Tal es la palabra clave que escribe en la tribuna enviada a 14 diarios regionales. Es cierto que la confianza de la que habla el presidente es, ante todo, "la que se da a los demás la que uno tiene en su interior", pero se entiende que cuando invita a sus lectores a "no tener miedo a los cambios" es a la política llevada, a cabo estos últimos años bajo su autoridad y a la que pretende realizar en el futuro a la que les invita a suscribir. Sería vano cuestionar si el jefe del Estado debe o no intervenir en una campaña legislativa. ( ... ) Esta vez estamos lejos de toda actitud arbitral y de toda perspectiva de apertura comparables a la intentada o simulada por Mitterrand en las elecciones posteriores a su reelección. Chirac designa a la izquierda, a toda la izquierda, como adversario, y se pone al frente de la derecha. De toda la derecha. ( ... ) Los sondeos han convencido al jefe del Estado para que se erija en federador de todos los que rechazan a la izquierda, en vez de situarse frente a los que amenazan los valores republicanos. ( ... ) Al tener Juppé dificultades para que una opinión pública hostil le escuche, el jefe del Estado toma el relevo. Espera que su posición institucional le proteja de la contestación que le valdría su balance, negativo para dos terceras partes de los franceses. Es una apuesta más., 8 de mayo