Veneno escondido
Le escribo con motivo del artículo aparecido en su periódico del 12 de febrero titulado Tabucchi escribe dos nuevos finales de 'Sostiene Pereira' como reacción a las denuncias de un escritor derechista.En mi libro La democrazia magica, publicado en enero por Einaudi, editor de ilustres tradiciones democráticas, cito la historia narrada en Sostiene Pereira tanto en la novela de Antonio Tabuechi como en la película de Roberto Faenza como ejemplo de una posible falsa conciencia del autor. Es uno de los temas estructurales del libro: tema que ya fue elaborado por Jean-Paul Sar...
Le escribo con motivo del artículo aparecido en su periódico del 12 de febrero titulado Tabucchi escribe dos nuevos finales de 'Sostiene Pereira' como reacción a las denuncias de un escritor derechista.En mi libro La democrazia magica, publicado en enero por Einaudi, editor de ilustres tradiciones democráticas, cito la historia narrada en Sostiene Pereira tanto en la novela de Antonio Tabuechi como en la película de Roberto Faenza como ejemplo de una posible falsa conciencia del autor. Es uno de los temas estructurales del libro: tema que ya fue elaborado por Jean-Paul Sartre. Sartre llamaba mala fe (del novelista) a lo que yo llamo falsa conciencia.
Pero Tabucchi ha basado su reacción (Corriere della Sera, 2 de febrero) en las pocas líneas que le afectan citadas por otro escritor, Nico Orengo, en el periódico La Stampa. Orengo las ha recortado y, por así decir, las ha expuesto; y esto le ha servido a Tabucchi para escribir sus finales de la novela en los que la miel de la fábula escondía el veneno (en relación a mi persona y no a mi texto).
En cuanto al personaje de Pereira, icono (en 1994) de la izquierda italiana, yo observaba que el defecto de consciencia del personaje y del autor no era muy distinto de los muchos defectos de consciencia de nuestra izquierda política: que a veces oscurece sus etapas callando y removiendo. ¿Le parece suficiente para que su periódico, resumiendo la cuestión, y basándose sólo en ese veneno escondido en una más o menos edificante fábula, me defina como escritor de derechas?