EE UU retirará sus últimos soldados de la base aérea de Torrejón tras la apertura al tráfico civil

Lo que no consiguieron las marchas pacifistas durante una década lo han logrado unos pocos vuelos comerciales en dos semanas. Estados Unidos quiere retirar sus últimas tropas de la base aérea de Torrejón de Ardoz, a 13 kilómetros de Madrid. El Pentágono ha llegado a la conclusión de que no le resulta rentable el pequeño destacamento, de 25 militares como máximo, que conserva en Torrejón desde la salida de los 72 cazas F-16, en marzo de 1992.

El ministro de Defensa, Eduardo Serra, aludió ayer en el Congreso, como mera hipótesis, a, la posibilidad de que Estados Unidos retire sus últi...

Lo que no consiguieron las marchas pacifistas durante una década lo han logrado unos pocos vuelos comerciales en dos semanas. Estados Unidos quiere retirar sus últimas tropas de la base aérea de Torrejón de Ardoz, a 13 kilómetros de Madrid. El Pentágono ha llegado a la conclusión de que no le resulta rentable el pequeño destacamento, de 25 militares como máximo, que conserva en Torrejón desde la salida de los 72 cazas F-16, en marzo de 1992.

El ministro de Defensa, Eduardo Serra, aludió ayer en el Congreso, como mera hipótesis, a, la posibilidad de que Estados Unidos retire sus últimas tropas de Torrejón. No quiso ir más allá porque la Administración norteamericana todavía no ha comunicado oficialmente tal decisión, aunque, según las fuentes consultadas, ésta se formalizará en breve.La apertura de la base aérea a los vuelos Civiles ha sido el detonante de un proyecto que Washington venía madurando desde hace tiempo y que tiene su origen en las incomodidades que la creciente saturación del tráfico aéreo sobre la capital española provoca a los aviones militares estadounidenses.

Los norteamericanos están presentes en Torrejón desde su inauguración, en septiembre de 1956. Hasta 1992, la base madrileña albergaba el Ala Táctica 401 de la USAF (Fuerzas Aéreas de Estados Unidos) y un contingente integrado por hasta 4.500 militares. En marzo de ese año, se retiró el último de los 72 cazas F-16, como consecuencia del convenio bilateral firmado en diciembre de 1988.

Desde entonces, EE UU mantiene en Torrejón un reducido destacamento, integrado por un máximo de 25 militares (en la práctica no pasan de 17) y hasta 50 civiles. Su labor se limita al apoyo a los aviones de transporte que llegan a la base, habitualmente en misiones de estafeta o traslado de valija,

Es este reducido contingente el que el Pentágono se propone suprimir, por no considerarlo rentable. Aunque el destacamento podría regresar mientras esté previsto en el convenio, los expertos consideran que su retirada es definitiva. Tras el abandono de Torrejón, la presencia norteamericana se limitará a las bases de Rota (Cádiz) y Morón de la Frontera (Sevilla).

El convenio vigente autoriza el despliegue en España de unos 6.800 militares de Estados Unidos, pero la cifra real es de sólo 3.900, lo que supone un 58% de lo permitido, según explicó ayer Eduardo Serra.

La salida de Torrejón no está vinculada a ningún incremento de tropas norteamericanas en otra base española, según las fuentes consultadas. Dichas fuentes no descartaron, sin embargo, que a medio plazo, EE UU solicite volver a utilizar la base de Zaragoza, que abandonó unilateralmente en octubre de 1992, pese a que el convenio le permite mantener en ella unos 2.000 militares.

Inspección de Zaragoza

Según explicó ayer Serra, la USAF solicitó en julio una visita de inspección a Zaragoza, de cara a su posible uso futuro en apoyo a "un mando aéreo móvil de aviones cisterna o de operaciones de transporte".La visita fue autorizada por el Ministerio de Defensa, pero no se realizó. Los nortemaricanos reiteraron la petición en noviembre y esta vez se denegó, debido a la polémica provocada por una noticia de El Mundo, según la cual EE UU estaba negociando en secreto con Defensa "reabrir las bases de Torrejón y Zaragoza".

Serra reiteró ayer que nunca hubo, negociación secreta porque no hubo ninguna petición de reutilizar Tórrejón o Zaragoza, sino sólo de inspeccionar la segunda. Esta inspección se enmarca en el estudio global que realiza el Pentágono sobre la insfraestructura que puede utilizar en Europa como apoyo a operaciones de transporte.

Dicho plan dará probablemente lugar, en opinión de los expertos, a un nuevo redespliegue o reducción de las tropas norteamericanas en el viejo continente. Aunque la visita a Zaragoza no llegó a realizarse, EE UU dispone ya de los datos técnicos que pretendía obtener con su inspección.

El ministro Eduardo Serra indicó ayer que, tras la cumbre del próximo mes de julio en Madrid, donde está previsto que se apruebe la nueva estructura militar de la OTAN, el Gobierno español valorará si prorroga el actual convenio con los EE UU o "es bueno renegociar uno nuevo desde el principio". El convenio actual, cuya vigencia concluía el próximo 4 de mayo, ha sido prorrogado automáticamente por un año. En el casa. de que alguna de las dos partes lo quisiera renegociar, debería denunciarlo antes del 4 de noviembre.

"Políticamente aceptable"

Por otra parte, Serra consideró ayer "imprescindible" que el Ejército del Aire cuente con un polígono de tiro para el entrenamiento de sus aviones. En respuesta a una interpelación del senador del PNV Imanol Bolinaga, el ministro admitió que el polígono de Bardenas Reales (Navarra), el único actualmente en funcionamiento, "no es el ideal", tanto por su escasa superficie, como por sus condiciones climatológicas y su localización geográfica.El hecho de que el arrendamiento de Bardenas sea temporal y concluya en el año 2001 justifica doblemente, agregó, la búsqueda de un emplazamiento -alternativo que, según sus palabras, debe ser. "técnicamente adecuado y políticamente aceptable". Serra no quiso revelar las opciones que se barajan y se limitó a señalar que ha quedado descartado el campo de maniobras de El Teleno (León).

Por otra parte, fuentes de Defensa indicaron que previsiblemente el Consejo de Ministros del próximo viernes aprobará, la desclasificación de la Directiva de Defensa Nacional 1 / 96, el documento que define la política de defensa del Gobierno, que fue firmado por el presidente José María Aznar el pasado 20 de diciembre y aún permanece secreto.