Cartas al director

Nuestros amigos...

Hace tres semanas me regalaron un precioso perrito dorado de raza cocker spaniel inglés con pedigrí y dos meses de vida. Truko es alegre y de buen carácter, y ha sido recibido con gran cariño por mi familia. A las tres semanas de tenerlo en casa le notamos una dureza en una oreja y lo llevamos al veterinario. Tiene hongos, lo que algunos conocen como tiña. Es una enfermedad engorrosa, difícil de eliminar, contagiosa para los humanos (yo tengo dos hijas pequeñas que juegan constantemente con el perro) y dolorosa para el animal, que tiene que sufrir las continuas curas. La enfermedad se l...

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Hace tres semanas me regalaron un precioso perrito dorado de raza cocker spaniel inglés con pedigrí y dos meses de vida. Truko es alegre y de buen carácter, y ha sido recibido con gran cariño por mi familia. A las tres semanas de tenerlo en casa le notamos una dureza en una oreja y lo llevamos al veterinario. Tiene hongos, lo que algunos conocen como tiña. Es una enfermedad engorrosa, difícil de eliminar, contagiosa para los humanos (yo tengo dos hijas pequeñas que juegan constantemente con el perro) y dolorosa para el animal, que tiene que sufrir las continuas curas. La enfermedad se le ha extendido.La veterinaria aseguró que esta enfermedad está originada por la falta de higiene y que, si en mi casa hay limpieza, de lo que tengo la más absoluta seguridad, pues la conclusión lógica es que Truko ya venía así de fábrica. El perro fue adquirido en una tienda situada en el centro comercial de La Vaguada. Allí me encaminé para pedir explicaciones. Me dijeron que ellos no se responsabilizan del animal una vez que sale de la tienda, que los hongos van "por el aire" y que se pueden coger "en dos días". Además, me aseguraron que los hongos se quitan fácilmente y que el tratamiento que sigo no es el correcto, aunque no me ofrecieron alternativa. Me dijeron que tenía que haber acudido a su veterinario (en el centro) y no al que a mí me queda más cerca de casa (vivo en Las Rozas). En resumen: que me las componga como pueda.

Desearía, por un lado, que la gente tuviera mucho cuidado al comprar animales en esta tienda y, por otro, que los responsables de la misma tomaran medidas higiénicas para evitar este tipo de enfermedades, como desinfectar las jaulas diariamente, tener menos cachorrillos juntos, cambiar más a menudo los papeles, etcétera- Tampoco estaría de más obligarles a este tipo de establecimientos a ofrecer una garantía por el buen estado de los animales que venden-

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