Crece la polémica de la enfermedad de Juan Pablo II

Juan Pablo II se internará en el Policlínico Gemelli el domingo por la tarde. Eso es seguro, porque la noticia fue confirmada ayer oficialmente por el jefe de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Joaquín Navarro Valls. Muy probablemente, será operado a primera hora del martes. Pero Navarro ha tenido que intervenir, además, para volver a descartar los rumores de que el Papa tiene de nuevo un tumor y no apendicitis."Es un ejemplo de fantamedicina", afirmó ayer Giorgio Ribotta, uno de los médicos que firmó el diagnóstico de la apendicitis crónica, en relación con los rumores de una e...

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Juan Pablo II se internará en el Policlínico Gemelli el domingo por la tarde. Eso es seguro, porque la noticia fue confirmada ayer oficialmente por el jefe de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Joaquín Navarro Valls. Muy probablemente, será operado a primera hora del martes. Pero Navarro ha tenido que intervenir, además, para volver a descartar los rumores de que el Papa tiene de nuevo un tumor y no apendicitis."Es un ejemplo de fantamedicina", afirmó ayer Giorgio Ribotta, uno de los médicos que firmó el diagnóstico de la apendicitis crónica, en relación con los rumores de una enfermedad más grave. "Ante todo, la reproducción de un tumor benigno no existe en medicina, es una contradicción", declaró aludiendo al diagnóstico oficial que calificó de "benigno" el tumor que le fue extirpado al Papa del colon en julio de hace cuatro años. Los galenos que barajan la hipótesis de que la enfermedad del Papa pueda ser de nuevo tumoral, asumen que, en tal caso, el tumor de 1992 fue maligno.

Ribotta, que es director de la Clínica Quirúrgica de la Universidad La Sapienza de Roma y fue llamado al Vaticano para la consulta extraordinaria del 14 de septiembre, añade que "el Papa ha sido sometido a todos los controles instrumentales, incluida la colonscopia", y responde también a los que han dicho que una hora de quirófano es demasiada para una apendicitis. "Sería correcta definirla excesiva, si se tratara de un muchacho de 20 años, para el que bastan una veintena de minutos. Pero si cuando se opera a una persona que tuvo dos balas en la tripa y ya ha sido operado, hace falta algo más de tiempo, 40 minutos o una hora", dijo ayer el galeno.

Nadie ha respondido, hasta ahora, a las objeciones avanzadas por otros médicos de que la apendicitis crónica es una enfermedad que sólo se presenta en casos rarísimos, hasta el punto dé que ha dejado de figurar en los manuales; o de que, incluso cuando está confirmada, no suele ser operada en el caso de ancianos. En esos mismos medios médicos se sugiere que los transtornos del Papa podrían deberse a adherencias causadas por las operaciones anteriores a las que aludió Navarro en septiembre, o por un proceso canceroso.

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