MÚSICA DE CAMPAMENTO

Los derechos de autor podrían llegar a las canciones de los campamentos juveniles. Aunque ahora se habla de una pifia de relaciones públicas de primer orden, la sociedad norteamericana que regula los derechos de autor, ASCAP, quería cobrar de las chicas guías, o scouts femeninos, una cuota para la música registrada con copyright o propiedad intelectual que ellas cantan alrededor del fuego de campamento. La prensa del país reaccionó indignada y ASCAP empleó sus esfuerzos en una operación de rescate. Los campamentos de chicas guías son no lucrativos, y la presidenta de ASCAP...

Los derechos de autor podrían llegar a las canciones de los campamentos juveniles. Aunque ahora se habla de una pifia de relaciones públicas de primer orden, la sociedad norteamericana que regula los derechos de autor, ASCAP, quería cobrar de las chicas guías, o scouts femeninos, una cuota para la música registrada con copyright o propiedad intelectual que ellas cantan alrededor del fuego de campamento. La prensa del país reaccionó indignada y ASCAP empleó sus esfuerzos en una operación de rescate. Los campamentos de chicas guías son no lucrativos, y la presidenta de ASCAP, Marilyn Bergman, acaba de decir: "Buscamos un encuentro con las líderes de las chicas guías para rectificar el malentendido que causó esta situación desafortunada". El director de registros de ASCAP, Vince Candilora, añadió: "No cobraremos unos derechos de los campamentos si las actuaciones de música se celebran alrededor de los fuegos. La mayoría de estos campamentos no tocan música por motivos sociales, sino educativos". Según el diario financiero The Wall Street Journal, el difunto Irving Berlin, un gran compositor y fundador de ASCAP, donó los derechos futuros de su canción God bless America (Dios bendiga a América) en 1940 a las chicas guías y a los scouts de Estados Unidos.-