Malestar con Gómez de Liaño por retrasar el registro

Fuentes próximas a la investigación expresaron ayer su malestar con el juez Javier Gómez de Liaño, por retrasar 24 horas el registro de la redacción de Egin. La Guardia Civil pidió un mandamiento judicial para revisar la sede del rotativo abertzale el sábado por la mañana, inmediatamente después de la detención de los dos redactores, que se produjo esa madrugada en sus domicilios.Sin embargo, el titular del juzgado número 1 de la Audiencia Nacional no libró la correspondiente orden hasta las 11.40 de ayer y limitada a la mesa de trabajo del periodista Fernando Alonso.

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Fuentes próximas a la investigación expresaron ayer su malestar con el juez Javier Gómez de Liaño, por retrasar 24 horas el registro de la redacción de Egin. La Guardia Civil pidió un mandamiento judicial para revisar la sede del rotativo abertzale el sábado por la mañana, inmediatamente después de la detención de los dos redactores, que se produjo esa madrugada en sus domicilios.Sin embargo, el titular del juzgado número 1 de la Audiencia Nacional no libró la correspondiente orden hasta las 11.40 de ayer y limitada a la mesa de trabajo del periodista Fernando Alonso.

Las fuentes consultadas se mostraron muy pesimistas sobre la posibilidad de que el registro diese algún resultado debido a que, durante el tiempo transcurrido desde que se difundieron las detenciones, podrían haberse eliminado eventuales pruebas.

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Pese a ello, fuentes del Gobierno Civil de Guipúzcoa aseguraron por la tarde haber encontrado "documentación relativa a posibles objetivos de ETA" en la redacción del rotativo.

Prisión incondicional

Los dos detenidos Fernando Alonso y Andoni Murga, llegaron a la Audiencia Nacional a las 10.20 horas y comparecieron ante el juez Gómez de Liaño dos horas después. Al término de las diligencias, el magistrado dictó auto de prisión incondicional e incomunicada, hasta el viernes 23 de agosto, contra los dos periodistas, que fueron trasladados a las 16.30 horas a la cárcel de Navalcarnero, a 30 kilómetros de Madrid.El juez les imputa cuatro delitos: pertenencia a banda armada, concretamente al comando Sugoi de ETA, tenencia de explosivos, posesión de armamento y terrorismo. Este último por su presunta participación en el atentado perpetrado el pasado jueves contra una empresa de peletería en Salvatierra (Álava). El magistrado elevó la causa a sumario y lo declaró secreto durante un mes.

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El abogado de los periodistas, Álvaro Raizábal, explicó que éstos se habían negado a contestar a las preguntas del fiscal y que él no les preguntó qué hicieron la madrugada del día 15, cuando se produjo el atentado.

Los detenidos se desdijeron de sus declaraciones ante la Guardia Civil, alegando que habían sido objeto de torturas. Sin embargo, antes de comparecer ante el juez fueron examinados por el médico forense del juzgado, quien certificó que se encontraban en buen estado físico.

Por otra parte, el secretario general del PP del País Vasco, Carlos Iturgaiz, pidió ayer a la fiscalía que investigue "los lazos de unión". entre el diario Egin y ETA.

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