Malestar duradero

El mercado financiero español siguió ayer bajo la presión del papel, confirmando el malestar que se ha creado entre los inversores en los últimos días. La Bolsa fue una de las que más bajo en el continente, a pesar de que el mercado de deuda conseguía una pequeña reacción positiva a primeras horas de la mañana. Justo en ese momento, el índice general de Madrid caía hasta el 345,77%, 10 centésimas por debajo del nivel que tenía el pasado día 1 de marzo, es decir, cuando estaba en plena valoración de una victoria absoluta del partido que ahora gobierna. Las dificultades para deshacerse del papel...

El mercado financiero español siguió ayer bajo la presión del papel, confirmando el malestar que se ha creado entre los inversores en los últimos días. La Bolsa fue una de las que más bajo en el continente, a pesar de que el mercado de deuda conseguía una pequeña reacción positiva a primeras horas de la mañana. Justo en ese momento, el índice general de Madrid caía hasta el 345,77%, 10 centésimas por debajo del nivel que tenía el pasado día 1 de marzo, es decir, cuando estaba en plena valoración de una victoria absoluta del partido que ahora gobierna. Las dificultades para deshacerse del papel son grandes, ya que escasean los tomadores y las transacciones se hacen con cuentagotas, lo que obliga a los teóricos vendedores a extremar la prudencia para no provocar un derrumbe de las cotizaciones.La contratación de esta sesión fue de 23.760 millones de pesetas efectivas, con una concentración muy alta en los grandes valores y alguna que otra aplicación. El diferencial de la deuda con Alemania bajó dos centésimas debido a la pérdida de precio del bund. Madrid bajó al cierre un 0,76% y el Ibex 35 el 0,72%.