10 campesinos indios mueren a manos de una banda armada por terratenientes

La violencia política parece estar detrás de la matanza desencadenada en la noche del pasado jueves al viernes por una banda armada por terratenientes al este de la India. Al menos 19 campesinos pobres de la aislada villa de Bathani Tola, en el Estado de Bihar, bastión de un partido maoísta, murieron en el ataque, que dejó numerosos heridos. Todas las víctimas menos una eran mujeres y niños, según informó D. P. Maheswari, secretario del Ministerio del Interior de Bihar, desde Patna, la capital del Estado.

K. D.. Yadav, uno de los dirigentes del Partido Comunista de la India, aseguró que...

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La violencia política parece estar detrás de la matanza desencadenada en la noche del pasado jueves al viernes por una banda armada por terratenientes al este de la India. Al menos 19 campesinos pobres de la aislada villa de Bathani Tola, en el Estado de Bihar, bastión de un partido maoísta, murieron en el ataque, que dejó numerosos heridos. Todas las víctimas menos una eran mujeres y niños, según informó D. P. Maheswari, secretario del Ministerio del Interior de Bihar, desde Patna, la capital del Estado.

K. D.. Yadav, uno de los dirigentes del Partido Comunista de la India, aseguró que los muertos eran 20, entre ellos seis miembros de una misma familia.La policía requisó cuatro armas de fuego y gran cantidad de municiones en un registro que realizó en la zona poco después de la matanza, señaló Maheswari, que ayer se esforzó en hacer votos en favor de la calma en un Estado como el de Bihar, donde las divisiones entre castas de ricos propietarios y campesinos pobres son profundas y donde la criminalidad es muy elevada. El grupo Raribir Sena, una milicia privada fuera de la ley y a la que se atribuye la responsabilidad de las muertes, no sólo se ensañó con los campesinos sino que incendió unas setenta casuchas en la región, lo que hizo temer que se desencadenara una oleada de violencia.

Las víctimas pertenecen a familias de castas inferiores vinculadas con los maoístas. D. P. Maheswari aseguró que la matanza "fue una represalia esporádica. Durante mucho tiempo la enemistad ha sido muy grande entre los marxistas-leninistas y los terratenientes". "La situación está ahora tranquila, aunque, sin duda, algo tensa",, recalcó el delegado del Ministerio del Interior. Según informes periodísticos, en los últimos doce meses han muerto 200 personas en enfrentamientos entre castas rivales.

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