El PSOE condiciona la plena integración militar en la OTAN a Gibraltar

"No me cabe en la cabeza que ningún gobierno pida el apoyo del Parlamento para integrar a España en la nueva estructura militar de la OTAN si no desaparece el mando de Gibraltar". Así se expresa Rafael Estrella, diputado del PSOE y vicepresidente de la Comisión de Exteriores del Congreso. Para el PSOE, la supresión del mando aliado del Peñón (Gibmed) no es ni siquiera una condición. Se trata de un requisito previo para poder plantearse la integración militar.

Los socialistas son partidarios de que España participe activamente en el diseño de la nueva estructura militar de la OTAN y de q...

"No me cabe en la cabeza que ningún gobierno pida el apoyo del Parlamento para integrar a España en la nueva estructura militar de la OTAN si no desaparece el mando de Gibraltar". Así se expresa Rafael Estrella, diputado del PSOE y vicepresidente de la Comisión de Exteriores del Congreso. Para el PSOE, la supresión del mando aliado del Peñón (Gibmed) no es ni siquiera una condición. Se trata de un requisito previo para poder plantearse la integración militar.

Los socialistas son partidarios de que España participe activamente en el diseño de la nueva estructura militar de la OTAN y de que lo haga, además, con la clara vocación de integrarse en la misma.Sin embargo, advierte Estrella, no hay que precipitarse en la decisión, pues algunas cuestiones, como la supresión del mando del Gibraltar, sólo quedarán definitivamente despejadas al final del proceso. Por eso, el PSOE discrepa del propósito gubernamental de que el próximo otoño, antes de que se conozca la nueva estructura de la OTAN, el Parlamento se pronuncie en favor de la integración.

Todas las opciones que la OTAN tiene actualmente sobre la mesa incluyen la supresión del mando de Gibraltar, no tanto porque se contemple un tratamiento específico para esta cuestión sino porque, al simplificarse la estructura, desaparecen todos los mandos subordinados del nivel del que hay en la Roca.

Pese a ello, las fuentes consultadas no descartan que, a última hora, el Reino Unido pudiera intentar una maniobra para resucitar el mando de Gibraltar por la puerta trasera. La supresión del Gibmed ha sido una prioridad para España desde su ingreso en la OTAN en 1982. Fuentes gubernamentales advierten, no obstante, que sería un error plantear una batalla abierta y que se trata, más bien, de que el mando del Peñón desaparezca dentro de un proceso más general.

Las mismas fuentes subrayan la necesidad de que España muestre claramente su voluntad de integrarse en la nueva estructura antes de que esté totalmente definida, precisamente para influir en su configuración. "Si uno quiere comprar un autobús, debe saber antes cuántos pasajeros va a llevar, pues eso condiciona el número de plazas y el precio final", argumentan.

El Gobierno cuenta con el tradicional apoyo de Convergència i Unió (CiU) y el PNV a la plena integración en la OTAN y confía en que el PSOE, que cuando estaba en el Gobierno inició este proceso, se sume Finalmente al consenso, a pesar de sus reparos a respaldar el ingreso en la estructura militar antes de que concluya la negociación.

Por el contrario, da por descontada la oposición de Izquierda Unida, que se opone a la integración en la nueva estructura y está dispuesta a organizar un referéndum paralelo si el Gobierno persiste en integrar totalmente a España en la OTAN sin repetir la consulta de 1986.