Tráfico dosifica el dramatismo en su nueva campana de televisión

La nueva campaña de prevención de accidentes de tráfico para la televisión, que se estrena el próximo fin de semana, mantiene la línea, dramática de ediciones anteriores, pero más dosificada, sin mostrar en primer plano la simulación de los accidentes ni la sangre de las víctimas.Su presentación contó por primera vez con la presencia de un ministro del Interior, en este caso Jaime Mayor Oreja, quien concluido el acto se ausentó sin hacer declaraciones.

El recién nombrado director general de Tráfico, Carlos Muñoz-Repiso, se ha encontrado la campaña prácticamente hecha, ya que la convocat...

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La nueva campaña de prevención de accidentes de tráfico para la televisión, que se estrena el próximo fin de semana, mantiene la línea, dramática de ediciones anteriores, pero más dosificada, sin mostrar en primer plano la simulación de los accidentes ni la sangre de las víctimas.Su presentación contó por primera vez con la presencia de un ministro del Interior, en este caso Jaime Mayor Oreja, quien concluido el acto se ausentó sin hacer declaraciones.

El recién nombrado director general de Tráfico, Carlos Muñoz-Repiso, se ha encontrado la campaña prácticamente hecha, ya que la convocatoria se hizo durante la gestión de su antecesor, Manuel María Muñoz. De las 19 agencias de publicidad que compitieron por hacerse con la cuenta de Tráfico -2.000 millones de pesetas-, la DGT optó por McCann Erickson, una agencia que absorbió a Clarín, la primera en iniciar la línea de imágenes realistas sobre los accidentes y sus nefastas consecuencias.

El efecto choque se ha disipado, ha perdido fuerza e impacto en la audiencia. El director de la DGT cree que la sangre y la brutalidad de los accidentes en primer plano no consiguen el efecto que se busca, la, prudencia de los conductores. Con las mismas referencias que en años anteriores -alcohol, uso del casco, imprudencias por cansancio y velocidad-, la campaña ofrece barridos de imágenes sobre accidentes, precedidos de tomas a conductores que hacen alardes de exceso de velocidad y caso omiso de los cinturones de seguridad.

151 víctimas menos

"Éstos son los síntomas de una paraplejia, una lesión cerebral, una parada cardiorespiratoria, un politraumatismo..." Detrás de cada uno de estos encabezamientos se suceden las imágenes de conductores arrogantes y la siguiente afirmación en pantalla: "Si tienes algunos de estos síntomas, en cualquier momento puedes sufrir una lesión cerebral, una parada cardiaca ...". Una viuda en un entierro, unos padres alarmados o un grito junto a la morgue de un hospital cierran el anuncio con el eslogan: "La solución está en tus manos".Carlos Muñoz-Repiso, que ha escalado en dos ocasiones alturas superiores a los 8.000 metros en la cordillera del Himalaya y practica una hora diaria de footing antes de acudir a su trabajo, cree que este tipo de campañas han sido decisivas en la reducción de la accidentalidad de la circulación, pero no por ello quita méritos a la mejora de la calidad de las carreteras o factores coyunturales como la meteorología.

Sobre la anunciada elevación del límite de velocidad en las autopistas y autovías, confesó que no existe un "clamor popular" que lo reclame, e insistió en que es materia de estudio en un grupo de trabajo específico, dentro del Consejo Superior de Tráfico. Fijó para comienzos del próximo año la entrada en vigor del Reglamento del Conductor.

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La siniestralidad del tráfico evoluciona positivamente. Al día de ayer, la estadística arroja 151 víctimas mortales menos en lo que va de año con relación al mismo periodo de 1995.

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