La Policía acaba con un motín de 300 presos en una cárcel de Francia

Tres heridos leves es el balance provisional del motín ocurrido ayer en la cárcel de Dijon que terminó cinco horas después de haber comenzado tras una intervención de la gendarmería. Los heridos son dos detenidos, que sufrían síntomas de intoxicación al haberse registrado un importante incendio, y un policía de seguridad urbana que sufría una ligera lesión en la cara causada por un proyectil lanzado por un recluso.

Los presos causaron importantes daños materiales. en la prisión, especialmente en su estructura superior que fue devastada por las llamas. El motín, que al parecer no estaba ...

Tres heridos leves es el balance provisional del motín ocurrido ayer en la cárcel de Dijon que terminó cinco horas después de haber comenzado tras una intervención de la gendarmería. Los heridos son dos detenidos, que sufrían síntomas de intoxicación al haberse registrado un importante incendio, y un policía de seguridad urbana que sufría una ligera lesión en la cara causada por un proyectil lanzado por un recluso.

Los presos causaron importantes daños materiales. en la prisión, especialmente en su estructura superior que fue devastada por las llamas. El motín, que al parecer no estaba preparado, comenzó por la tarde cuando varios reclusos rehusaron volver a sus celdas, después del tiempo de paseo, Estos bloquearon al guardia, de servicio y le sustrajeron las llaves que dan acceso a las celdas. Los amotinados, que tenían en su poder sopletes y aparatos eléctricos procedentes de los talleres de la prisión, comenzaron a abrir las puertas de todas las celdas y encendieron dos fuegos con colchones, uno en el patio y otro en la zona de celdas.Dos horas media después de comenzar el motín, las autoridades desplegaron un importante dispositivo policial en la prisión. Mientras aumentaba la tensión en el exterior, con la presencia de familiares, los gendarmes penetraron en el edificio donde en poco tiempo consiguieron el control de la segunda y tercera planta. La operación terminó cinco horas después de comenzar el motín, con el agrupamiento de los presos.

El prefecto de la región, Jacques Barrel, dio la orden de asalto para, poner término a la revuelta a falta de reivindicaciones de los presos. En unas primeras declaraciones, el prefecto explicó que las autoridades intentaron "entablar el diálogo pero no hubo verdadera discusión".

Por su parte, el fiscal de Dijon, lkené Meyer, declaró que la revuelta fue lanzada por "un puñado de individuos" y, que éstos habían sido "identificados" y "serán inculpados". Meyer estimó que las condiciones de detención en Dijon son "buenas".