CAMPAÑA ELECTORAL

La pelea de Vigo reabre la crisis de los socialistas gallegos

La pelea entre militantes socialistas en una de las agrupaciones de Vigo amenaza con reabrir en el PSOE gallego el enfrentamiento entre guerristas y renovadores que se daba por cerrado desde hace un año. "O se expulsa a los agresores o me iré del partido", ha advertido su secretario general, el guerrista Francisco Vázquez, mientras que el ex alcalde de Vigo, el renovador Carlos Príncipe, apunta que los incidentes hay que interpretarlos "en clave doméstica", al margen de las corrientes partidarias. Los dirigentes de la agrupación viguesa donde se produjo la pelea el viernes por la noche respons...

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La pelea entre militantes socialistas en una de las agrupaciones de Vigo amenaza con reabrir en el PSOE gallego el enfrentamiento entre guerristas y renovadores que se daba por cerrado desde hace un año. "O se expulsa a los agresores o me iré del partido", ha advertido su secretario general, el guerrista Francisco Vázquez, mientras que el ex alcalde de Vigo, el renovador Carlos Príncipe, apunta que los incidentes hay que interpretarlos "en clave doméstica", al margen de las corrientes partidarias. Los dirigentes de la agrupación viguesa donde se produjo la pelea el viernes por la noche responsabilizan de ella a partidarios de Príncipe, mientras que éstos atribuyen el detonante del en frentamiento a las prácticas no democráticas de la asamblea que debía proponer los candidatos para las próximas elecciones. Como consecuencia de la riña, varios militantes precisaron atención hospitalaria.Los incidentes reabren el conflicto entre guerristas y renovadores que alcanzó su máxima crispación en 1993, primero durante la elaboración de las candidaturas y, más tarde, al no ser incluido ningún guerrista en las elecciones autonómicas de ese año. Los malos resultados del PSOE motivaron la convocatoria de un congreso extraordinario, en mayo de 1994, en el que los guerristas coparon todos los puestos de la ejecutiva gallega, con Abel Caballero en la presidencia y Vázquez en la secretaría general.

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Integración fallida

Hace un año, no obstante, el portavoz parlamentario socialista, el renovador Miguel Cortizo, aceptó participar en un proceso integrador de ambas corrientes propiciado por Vázquez. De ese proceso quedó descolgado Príncipe, cuya vocación de liderazgo del sector renovador quedó aún más mermada por su pérdida de la alcaldía en las municipales.Ahora, Príncipe aspira a encabezar la candidatura socialista al Senado por Pontevedra. Pero, su rivalidad con Abel Caballero en la misma provincia -aunque éste se postule para el Congreso- promete una dura pugna. En la agrupación de Vigo-Centro, la propuesta de incluir a Caballero como candidato obtuvo un respaldo insignificante, mientras que en la de Vigo-Este sucedió lo contrario. En la agrupación Oeste, se suspendió la asamblea por la bronca entre ambos sectores. Las listas y los incidentes serán analizados mañana por la comisión ejecutiva gallega.

Falta por determinar quién inició la gresca. Vázquez apunta tácitamente a los partidarios de Príncipe, y uno de éstos, el concejal Fernando González, ha anunciado que se querellará contra el secretario de organización de la agrupación donde ocurrió la pelea, Doro Piñeiro, que le identifica como uno de los agresores.

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