Entrevista:

"Madrid tiene el espíritu que inspira a los pintores"

Su obra, premio de honor, se titulá Disco Siracusa. Es el retrato sutil de un hombre con centrado en el movimiento circular del lanzamiento. Arturo Prins, argentino de 23 años, refuerza su explicación rozando el lienzo con la mano, gesto, del artista que el público sólo imitaría a hurtadillas. Cinco Millones de pesetas, netas, afianzan su azarosa relación con la XI Bienal, concurso al que acudió por sugerencia de un amigo, presentando su trabajo a sólo dos horas de expirar el plazo de admisión de originales. La diplomacia, profesión de sus padres, le trajo a Madrid hace cinco anos, y l...

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Su obra, premio de honor, se titulá Disco Siracusa. Es el retrato sutil de un hombre con centrado en el movimiento circular del lanzamiento. Arturo Prins, argentino de 23 años, refuerza su explicación rozando el lienzo con la mano, gesto, del artista que el público sólo imitaría a hurtadillas. Cinco Millones de pesetas, netas, afianzan su azarosa relación con la XI Bienal, concurso al que acudió por sugerencia de un amigo, presentando su trabajo a sólo dos horas de expirar el plazo de admisión de originales. La diplomacia, profesión de sus padres, le trajo a Madrid hace cinco anos, y las bellas artes decidieron Su afincamiento en un lugar cuyo espíritu le convoca a las musas. Arturo vive en un colegio mayor, completa en academia sus clases de tercero y sueña con un luminoso estudio en el centro de Madrid..Pregunta. -¿Qué piensa hacer con el dinero del premio?

Respuesta. El 25% es para Hacienda. Algún que otro capricho, comprar material para pintar en gran tamaño y becarme durante todo este año, porque son mis padres quienes me costean todo.

P. ¿La Facultad de Bellas Artes es una buena escuela?

R. Es una institución donde uno aprende, si se dedica a escudriñar. Falta motivación, pero no creo que deba ser el profesor quien mueva al alumno, sobre todo porque hay mucha gente confusa que se matricula sin saber si quiere hacer diseño, arquitectura o, simplemente porque no salió plaza en otra facultad. Sólo tres profesores me han ayudado a desarrollar mi estilo.

Aprendo más en una escuela privada y sobre todo visitando galerías y el Centro Reina Sofía.

P. ¿Y el Prado?

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R. He de reconocer, no sin cierta vergüenza, mi deuda. con el Prado. Lo visité como un turista más en el 85 y luego tan sólo he vuelto dos días, muy de pasada. Sin renegar, ni mucho menos, de los clásicos, me interesa más el arte contemporáneo.

P. El madrileño es muy reacio a visitar galerías de arte.

R. Sí, parece que les frena el aspecto comercial de esos lugares. A mí no me ocurre, especialmente en dos, mis favoritas, las galerías Gamarra y Soledad Lorenzo.

P. ¿Qué es lo que más le inspira de Madrid?

R. Las, facilidades para moverse. La luz, esas viejas casas que me encantaría convertir en un estudio donde trabajar, el idioma, claro está. El clima, las comidas y en general muchas costumbres. Madrid tiene el espíritu que se necesita para pintar. Sólo le sobra el ruido.

XI Bienal Deporte en las Bellas Artes. Museo Nacional de Antropología. Avenida de Juan de Herrera, s/n. Ciudad Universitaria. Hasta el 30 de diciembre.

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