La Sala de Conflictos reprende a Garzón por no admitir el recurso de Pertierra

J. Y. La Sala de Conflictos de Jurisdicción admitió ayer a trámite el escrito presentado por el ministro de Defensa, Gustavo Suárez, Pertierra, contra el juez Baltasar Garzón, al que acusa de invadir competencias atribuidas, al Consejo de de Ministros, como es la clasificación y desclasificación de documentos como secretos, al haber solicitado reiteradas veces la entrega de varios documentos del Cesid sobre los GAL y la guerra sucia contra ETA. La sala no entra en el fondo de la cuestión, pero propina un varapalo a Garzón por haber inadmitido de principio el conflicto; es decir, por haber toma...

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J. Y. La Sala de Conflictos de Jurisdicción admitió ayer a trámite el escrito presentado por el ministro de Defensa, Gustavo Suárez, Pertierra, contra el juez Baltasar Garzón, al que acusa de invadir competencias atribuidas, al Consejo de de Ministros, como es la clasificación y desclasificación de documentos como secretos, al haber solicitado reiteradas veces la entrega de varios documentos del Cesid sobre los GAL y la guerra sucia contra ETA. La sala no entra en el fondo de la cuestión, pero propina un varapalo a Garzón por haber inadmitido de principio el conflicto; es decir, por haber tomado una decisión que correspondía al tribunal.

La resolución de la Sala de Conflictos establece en su preámbulo que el tribunal que tiene legitimidad constitucional para resolver el contencioso entre Garzón y Suárez Pertierra es el Tribunal de Conflictos Jurisdiccionales y hace hincapié en la obligación que tiene el juez de atenerse estrictamente a lo prevenido en la ley a este respecto. La Sala recuerda que el conflicto está planteado entre la Administración y un juez, y que una de las partes no puede resolver el incidente. Con ello desautoriza la decisión de Garzón de no admitir a trámite el escrito de Suárez Pertierra.El presidente del Gobierno, Felipe González, conoció la noticia en Estrasburgo, donde asistía a una reunión plenaria del Parlamento Europeo. En su opinión, la decisión de la Sala de Conflictos era la esperada por el Ejecutivo. "Yo siempre respeto las decisiones de los tribunales. Parecía lógico, pero no tengo más comentarios. Parece, evidente que confirma la tesis del Gobierno, aunque el problema de fondo se resolverá cuando se resuelva", manifestó.

La Sala de Conflictos requiere a Garzón para que sin dilación, y en todo caso en un plazo no superior a cinco días, cumplimente los artículos 11 y 12 de la ley de Conflictos de Jurisdicción. Estos artículos se refieren a la remisión de las actuaciones y a la paralización del procedimiento en lo que, se refiere a los documentos del Cesid, si bien el propio Garzón ya había acordado, la paralización cuando remitió el auto de no admisión al juez instructor del caso GAL en el Tribunal Supremo, Eduardo Móner.

Una vez Garzón haya cumplimentado este trámite, el tribunal dará traslado al fiscal y al abogado del Estado para que en el plazo comun de 10 días formulen sus alegaciones sobre el fondo del asunto. El tribunal deberá dictar sentencia en los 10 días siguientes.

Los ministros de Defensa, Gustavo Suárez Pertierra, y de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, manifestaron ayer su satisfacción por la decisión de la Sala de Conflictos. Pertierra destacó que la resolución demuestra que su actuacion en este caso ha respetado profundamente la legalidad. El ministro añadió que no tienen ningún sentido las afirmaciones de algunos partidos que le acusaban de obstruir la labor de la justicia, ni las del propio Garzón, que le achacaba estar metiendo un fraude de ley. Belloch dijo que la decisión demuestra que el Ejecutivo "había planteado bien el tema".

Garzón, por su parte, declaró a la Cadena SER que este fallo "era lo previsible". El magistrado indicó que contestará dentro de plazo a todo lo que se le ha requerido.

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La Sala de Conflictos está integrada, por el presidente del Tribunal Supremo, Pascual Sala, los magistrados de lo Contencioso Administrativo, José María Ruiz Jarabo y Pedro Esteban Álamo y los consejeros permanentes de Estado, Jerónimo Arozamena, Fernando de Mateo y Andrés Sánchez. En caso de empate el presidente tiene voto de calidad.

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