Tribuna:

El lado bueno.

Los inversores empiezan a valorar el aspecto positivo de la situación actual, que se reduce a pensar que si los mercados financieros pasan por alto la teórica suspensión de pagos del Gobierno norteamericano, ellos no tienen por qué ponerse nerviosos., El flujo de papel ha remitido considerablemente y sólo la escasez de órdenes de compra denota cierta indiferencia por la evolución de las cotizaciones. El volumen negociado ha mejorado el de la sesión anterior, aunque la cuarta parte de las operaciones se debieron al lavado de cupón sobre títulos de Hidroeléctrica del Cantábrico y de Corporación ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Los inversores empiezan a valorar el aspecto positivo de la situación actual, que se reduce a pensar que si los mercados financieros pasan por alto la teórica suspensión de pagos del Gobierno norteamericano, ellos no tienen por qué ponerse nerviosos., El flujo de papel ha remitido considerablemente y sólo la escasez de órdenes de compra denota cierta indiferencia por la evolución de las cotizaciones. El volumen negociado ha mejorado el de la sesión anterior, aunque la cuarta parte de las operaciones se debieron al lavado de cupón sobre títulos de Hidroeléctrica del Cantábrico y de Corporación Financiera Alba. El negocio final fue de 27.000 millones de pesetas.Si la Bolsa no tiene mucho atractivo para la inversión, el mercado secundario de deuda resultó beneficiado por las comparaciones, dando lugar a una un portante subida de los precios, con la consiguiente caída de las rentabilidades. La emisión del 1,0% terminó la jornada con una rentabilidad media del 10,63%, 12 centésimas inferior a la del día anterior. El Ibex 35 subió un 0,60% y el índice de Madrid el 0,79%, diferencia debida a la subida del Banco Exterior, valor que no entra en la elaboración del soporte del mercado de futuros.

Archivado En