El Ayuntamiento pagará la fianza del policía que mató a un fugitivo

El equipo de Gobierno del PP y los grupos de la oposición -tajanteniente el PSOE y "con precaución" IU- se mostraron ayer en contra de la prisión preventiva ordenada por la juez para el policía municipal Javier Díaz Aparicio, de 36 años. El agente mató el martes de un disparo a bocajarro a Pablo Vicho Lucas, de 24 años. El concejal de Seguridad, José Ignacio Echeverría, concretó ayer que el Ayuntamiento se haría cargo de la fianza que impusiera la magistrada María Luisa Lázaro en el caso de que decretara su libertad condicional. Díaz Aparicio ingresó el miércoles en la cárcel de Alcalá-Meco.Án...

El equipo de Gobierno del PP y los grupos de la oposición -tajanteniente el PSOE y "con precaución" IU- se mostraron ayer en contra de la prisión preventiva ordenada por la juez para el policía municipal Javier Díaz Aparicio, de 36 años. El agente mató el martes de un disparo a bocajarro a Pablo Vicho Lucas, de 24 años. El concejal de Seguridad, José Ignacio Echeverría, concretó ayer que el Ayuntamiento se haría cargo de la fianza que impusiera la magistrada María Luisa Lázaro en el caso de que decretara su libertad condicional. Díaz Aparicio ingresó el miércoles en la cárcel de Alcalá-Meco.Ángel Gil, el abogado defensor del policía presentó ayer un recurso contra el auto de encarcelamiento sin fianza. Gil es el letrado que la sección sindical de UGT puso a disposición del agente, aunque el sindicato aclaró que no tiene ninguna relación con la defensa jurídica. Gil comentó que su defendido, no ha cometido homicidio, ni se puede deducir que su acción haya provocado alarma social, tal y como explicaba la juez en su auto de prisión. Gil argumenta en su recurso que, como mucho, podría existir un delito de imprudencia, lo que a su vez respaldaría la petición de libertad con fianza, puesto que la imprudencia tiene menor penalización. Entierro de Vicho

"Ese policía debe pagar de forma severa por lo que ha hecho". Ese era el comentario unánime de las personas que ayer acudieron en el cementerio de Fuenlabrada (165.000 habitantes) al sepelio de Pablo Vicho. "Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias. No se puede matar a nadie por instinto", susurraba ayer uno de los tíos del fallecido.

Los familiares de Pablo Vicho no quieren juzgar ahora su tormentoso pasado: "Haya hecho lo que haya hecho, no tiene justificación alguna lo que pasó". Una de sus primas apuntaba que sólo esperan que la juez actúe sin presiones. Los amigos exigieron un castigo ejemplar para el policía municipal. "Ese policía no puede llevar una pipa [pistola]", comentaban. "Un policía debe ser responsable de su arma y sino está acostumbrado a utilizarla, que no la lleve", repetían los amigos de Pablo.

Según sus compañeros, Pablo Vicho era un amigo fiel. "Tenía su lado malo, pero era un pibe legal, muy amigo de sus amigos". "Pablo ha quedado como un hijo de puta porque tiene 26 antecedentes, pero eso no quiere decir que un policía le dispare a bocajarro, cuando se ha demostrado que él no intentaba hacer nada malo", decían. Sus amistades reconocen que había cometido muchos errores. "Se metía en líos, efectivamente", recuerda un amigo. "Pero pagó por ello y ha estado en la cárcel, y ha cumplido por lo que ha hecho". "Esperemos que el policía también pague por sus errores".