10.000 fieles retomaron ayer el rito de rezar frente a un fresno de El Escorial tras dos años de prohibición

Unas 10.000 personas, según la Guardia Civil, se congregaron ayer en la finca municipal de Prado Nuevo, en El Escorial (8.700 habitantes), para rezar y escuchar los mensajes de la vidente Amparo Cuevas. Estas personas creen que la Virgen se comunica cada prirrier sábado de mes con Cuevas para transmitirle un mensaje divino desde un fresno de la fin ca. Cuevas graba las supuestas palabras marianas en una cinta y luego sus seguidores las reproducen en la finca municipal ante miles de devotos llegados de toda España y del extranjero.Sin embargo, algunos vecinos de El Escorial desconfían de estas ...

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Unas 10.000 personas, según la Guardia Civil, se congregaron ayer en la finca municipal de Prado Nuevo, en El Escorial (8.700 habitantes), para rezar y escuchar los mensajes de la vidente Amparo Cuevas. Estas personas creen que la Virgen se comunica cada prirrier sábado de mes con Cuevas para transmitirle un mensaje divino desde un fresno de la fin ca. Cuevas graba las supuestas palabras marianas en una cinta y luego sus seguidores las reproducen en la finca municipal ante miles de devotos llegados de toda España y del extranjero.Sin embargo, algunos vecinos de El Escorial desconfían de estas creencias. Ayer organizaron en el prado, y a la misma hora que los fieles rezaban, una comida campestre. Entre bailes, risas y gritos intentaron reventar el acto. No lo consiguieron. La Guardia Civil les impidió poner en funcionamiento los potentes equipos musicales que les acompañaban. "Los fieles tienen permiso del Ayuntamiento [del PP] y ustedes no", les explicaron.

Mientras tanto, la vidente relataba el supuesto mensaje mariano, donde se comparaba a las personas que no comparten estas creencias con Ios romanos que perseguían a los cristianos". Entre ambos grupos hubo pequeños roces a lo largo de las más de dos horas que duró el acto. "¡Cállense! Estamos rezando", espetaban los fieles. Los vecinos respondían: "A ver si en el, prado de nuestro pueblo no vamos a poder comernos la tortilla".

Ayer fue el primer sábado, primero de mes, en el que los fieles pudieron rezar libremente. Hace año y medio, el anterior alcalde, Mariano Rodríguez, del PSOE, valló la finca para evitar los continuos conflictos entre los fieles y sus detractores.

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