Cartas al director

La 'repera'

Tras movilizar a 5.000 personas (preinscripciones, pagos, desplazamientos, academias), tengo mis fundadas sospechas de que, después de la selección aprobaron los previstos, con nombres y apellidos, de antemano por el tribunal. Cuando nos convocaron para el segundo examen -algo menos de 400 personas-, me presenté con bastante tiempo de antelación, por eso de los nervios, y allí pude comprobar en la cafetería, y posteriormente en muchas otras ocasiones, los abrazos, besos y demás saludos efusivos dirigidos a determinadas personas que casualmente luego resultaron ser miembros del tribunal....

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Tras movilizar a 5.000 personas (preinscripciones, pagos, desplazamientos, academias), tengo mis fundadas sospechas de que, después de la selección aprobaron los previstos, con nombres y apellidos, de antemano por el tribunal. Cuando nos convocaron para el segundo examen -algo menos de 400 personas-, me presenté con bastante tiempo de antelación, por eso de los nervios, y allí pude comprobar en la cafetería, y posteriormente en muchas otras ocasiones, los abrazos, besos y demás saludos efusivos dirigidos a determinadas personas que casualmente luego resultaron ser miembros del tribunal.Pero mi gran indignación fue cuando, tras salir la lista de los elegidos -mi nombre no apareció-, solicité al tribunal por escrito mi calificación en el ejercicio y su revisión, contestándome el secretario del tribunal personalmente que no van a dar más información: ni notas ni nada. Quisiera también aclarar que el segundo ejercicio consistía en una prueba escrita que leeríamos otro día según nos convocase el tribunal; dichas lecturas también fueron a puerta cerrada pese a mi solicitud para asistir como oyente: ¿será en atención al opositor o será que no quieren testigos?

La repera, el colmo de los colmos es que el defensor del opositor se encuentre fuera, por eso nadie respondía al teléfono que tan insistentemente marcaba; mi única esperanza es mandarle un fax (ahora, los opositores, si no tenemos fax, no hay nada que hacer) y esperar su contestación, según me dijeron en la oficina

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