Estefanía y Daniel se casaron en Mónaco

La princesa Estefanía de Mónaco y Daniel Ducruet, padre de sus dos hijos, se casaron ayer por lo civil en el Ayuntamiento del Principado, tras una convivencia de siete años y tras conseguir vencer las reticencias del príncipe Rainiero.La ceremonia se ofició en condiciones de intimidad, con sólo 40 asistentes miembros de la familia Grimaldi y algunos amigos. Tras la boda, los más allegados se reunieron en la residencia del nuevo matrimonio, Le Clos Saint Martin. Por la noche, en el hotel Loews, se celebró un banquete con 300 comensales.

Un par de fotógrafos de agencias que tomaban ayer i...

La princesa Estefanía de Mónaco y Daniel Ducruet, padre de sus dos hijos, se casaron ayer por lo civil en el Ayuntamiento del Principado, tras una convivencia de siete años y tras conseguir vencer las reticencias del príncipe Rainiero.La ceremonia se ofició en condiciones de intimidad, con sólo 40 asistentes miembros de la familia Grimaldi y algunos amigos. Tras la boda, los más allegados se reunieron en la residencia del nuevo matrimonio, Le Clos Saint Martin. Por la noche, en el hotel Loews, se celebró un banquete con 300 comensales.

Un par de fotógrafos de agencias que tomaban ayer imágenes del Ayuntamiento fueron arrestados por la policía. "Los fotógrafos están autorizados en la ciudad, pero el edificio del Ayuntamiento se encuentra bajo extrema vigilancia manifestaron fuentes el servicio de prensa del Principado, que anunciaron que mañana se distribuirán las dos únicas. fotos oficiales del enlace.

La expectación entre los medios informativos era enorme, por la relevancia de la pareja en la prensa del corazón desde que comenzaron sus relaciones cuando Ducruet trabajaba como guardaespaldas de la princesa con otra veintena de profesionales.

Hasta unirse a Ducruet, Estefanía mostró un carácter rebelde, que la llevó a hacerse cantante y diseñadora de moda y, sobre todo, a vivir escabrosas relaciones con diversos galanes.

En 1992 nació el primer hijo de Daniel y Estefanía, Louis, y en 1994 vino al mundo Pauline. En 1991 había nacido, fruto de otra relación de Ducruet, su hijo Daniel.

Rainiero, que al principio se opuso a la relación, ha acabado por ceder, tras una grave operación el pasado año y la reconciliación con su hija. Las pasadas Navidades se celebraron ya en un clima familiar relajado. El Príncipe reconoce hoy que Ducruet ha hecho "sentar la cabeza" a la menor de sus hijas y convertirla en una madre "feliz y tranquila".