De las puertas de metro

Nos disponíamos a entrar varias personas en un vagón del metro cuando nos hemos encontrado con la puerta en las narices.No es la primera vez que. ocurre esto. Debo dar las gracias al conductor, ya que esta vez, por lo menos ha tenido la amabilidad de dejamos fuera.

Otras veces ha habido algunz otra persona que se ha quedado "pillada" -con todas sus letras- entre las puertas de un vagón del ferrocarril metropolitano.

- La primera vez puede resultar divertido, pero cuando a diario ves la falta de educación de Metro, no te resulta tan divertido. Tampoco lo es cuando la encerrada ent...

Nos disponíamos a entrar varias personas en un vagón del metro cuando nos hemos encontrado con la puerta en las narices.No es la primera vez que. ocurre esto. Debo dar las gracias al conductor, ya que esta vez, por lo menos ha tenido la amabilidad de dejamos fuera.

Otras veces ha habido algunz otra persona que se ha quedado "pillada" -con todas sus letras- entre las puertas de un vagón del ferrocarril metropolitano.

- La primera vez puede resultar divertido, pero cuando a diario ves la falta de educación de Metro, no te resulta tan divertido. Tampoco lo es cuando la encerrada entre las puertas es una persona mayor o inválida. Quiero recordarles que el servicio de metro es un transporte público, destinado a jóvenes y ancianos. válidos v minusválidos, que aunque en Madrid siempre se va con prisas no quieren contribuir a los atropellamientos.Tampoco es un medio de diversion para sus conductores, que parece que juegan a ver quién atrapa a más personas, o quién va más rápido por las vías del metropolitano (para eso está el Rally París-Dakar).Entre Goya y Lista hay una curva que se toma demasiado velozmente, y los usuarios salimos despedidos. He sentido la desagradable experiencia de parecer ser transportada en un camión de cerdos, más que en el vagón de un metro.

Considero su buena voluntad de aumentar la vigilancia con el incremento de cámaras. Pienso que sería una buena medida, si estuviera respaldada por una mayor vigilancia de los trabajadores de Metro, ya que éste se ha convertido en el foco principal para carteristas (en su mayoría extranjeros).

Aunque de hecho ustedes han aumentado la vigilancia mediante agentes de seguridad, me atrevería a sugerirles que estudiaran mejor cómo aumentar esta seguridad.

Asimismo, el uso del interfono me parece un sistema lento (por el tiempo que tardan los trabajadores en contestar) e inútil.

Sería bueno que ustedes reconsideraran el servicio que Metro presta a los ciudadanos y que, aparte de aumentar las normas del fumar o no fumar, mejoren el trato y la consideración para con nosotros y la seguridad.

La presente carta no ha tenido ánimo de criticar negativamente ni de ofender al personal, sino, todo lo contrario, contribuir mediante ella a la mejora de su servicio.-