Liberado el asesino de un confidente que se ofreció a desentrañar el 'caso Brouard'

Miguel Ángel López Ocaña, condenado a más de años por el asesinato de su cuñado Alberto Granados Céspedes, un traficante de drogas que en 1984 se ofreció a la policía para descubrir a los autores del atentado mortal contra Santiago Brouard, ha obtenido la libertad condicional por padecer sida en fase terminal. Granados Céspedes, según acabó confesando su asesino ante los jueces de Bilbao, había aceptado participar en el atentado contra el médico y dirigente independentista, pero luego se volvió atrás.

Tras el asesinato de Brouard, Granados Céspedes entró en contacto con la policía de Bi...

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Miguel Ángel López Ocaña, condenado a más de años por el asesinato de su cuñado Alberto Granados Céspedes, un traficante de drogas que en 1984 se ofreció a la policía para descubrir a los autores del atentado mortal contra Santiago Brouard, ha obtenido la libertad condicional por padecer sida en fase terminal. Granados Céspedes, según acabó confesando su asesino ante los jueces de Bilbao, había aceptado participar en el atentado contra el médico y dirigente independentista, pero luego se volvió atrás.

Tras el asesinato de Brouard, Granados Céspedes entró en contacto con la policía de Bilbao para "vender" a los autores del hecho por cinco millones de pesetas. Según, acredita la sentencia del caso Brouard, las armas empleadas para matar al líder de Herri Batasuna estuvieron en la casa de Granados en Madrid.El hermano de Miguel Angel, Rafael López Ocaña, se encuentra encarcelado en Logroño, condenado como coautor del asesinato del líder independentista el 20 de noviembre de 1984. Rafael López Ocaña tiene la sentencia recurrida en casación. El recurso se estudiará en el Tribunal Supremo antes del verano, informa .

Miguel Ángel López Ocaña obtuvo la libertad condicional el pasado 17 de febrero en aplicación del artículo 60 de la Ley General Penitenciaria, que se refiere a reclusos con enfermedades incurables. López Ocaña padece sida en avanzado estado y se le ha puesto en la calle para que no fallezca en la prisión de León, donde se encontraba internado.

La norma general indica que la libertad condicional sólo se concede a los presos qué han cumplido las tres cuartas partes de la condena, incluidas redenciones. López Ocaña apenas ha pasado 10 años en prisión y se encontraba clasificado aún en segundo grado.

La petición de libertad de López Ocaña fue denegada por Instituciones Penitenciarias, pero presentó recurso ante el juez de Vigilancia Penitenciaria de Valladolid, José Luis de Castro Antonio, quien ha aceptado sus argumentos. Este juez dio permiso a Carlos García Juliá, condenado por la matanza de abogados laboralistas cometida en Madrid en enero de 1977, para que cumpliera la libertad condicional en Paraguay. Miguel Ángel López Ocaña ha ingresado en una granja terapéutica.

El recluso ahora liberado dio muerte a su cuñado el 15 de agosto de 1985. El suceso estaba relacionado con el asesinato de Brouard. Granados, según confesó luego López Ocaña al juzgado de Bilbao que investigó el atentado contra Brouard, ofreció al comisario Antonio Rosinos entregar a los asesinos del médico vasco.

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Una indiscrección pública del fiscal Emilio Valerio dio al traste con el plan al espantar al confidente. Miguel Angel López Ocaña llegó a reconocer que había matado a su cuñado "muy presionado" por Luis Morcillo Pinillo, buscado como coautor y organizador material del asesinato de Brouard.

También apuntó que Morcillo había recibido la orden de eliminar a Granados del teniente coronel de la Guardia Civil Rafael Masa González, después de que se conociera públicamente que había un confidente dispuesto a delatar a los asesinos de Brouard y de que Morcillo concluyera que se trataba de Granados.

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