El secretario general de la OTAN niega su implicación en un escándalo de corrupción

El secretario general de la OTAN y ex ministro de Exteriores belga, Willy Claes, desmintió ayer que esté implicado en el caso de corrupción por el que están acusados varios miembros de su formación política, el Partido Socialista Flamenco, a raíz del escándalo de los helicópteros. "Hice mi trabajo y no tengo nada que reprocharme", declaró Claes a la televisión belga tras la detención el pasado fin de semana de uno de los principales dirigentes de su partido.El caso se remonta a 1988, cuando el Ministerio de Defensa belga compró a la empresa aeronáutica italiana Agusta 46 helicópteros an...

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El secretario general de la OTAN y ex ministro de Exteriores belga, Willy Claes, desmintió ayer que esté implicado en el caso de corrupción por el que están acusados varios miembros de su formación política, el Partido Socialista Flamenco, a raíz del escándalo de los helicópteros. "Hice mi trabajo y no tengo nada que reprocharme", declaró Claes a la televisión belga tras la detención el pasado fin de semana de uno de los principales dirigentes de su partido.El caso se remonta a 1988, cuando el Ministerio de Defensa belga compró a la empresa aeronáutica italiana Agusta 46 helicópteros antitanque por un importe de 50.000 millones de pesetas. El antiguo secretario general de los socialistas flamencos, Luc Walleyn, y el representante de la firma Agusta en Bélgica cuando se firmó el. contrato, Georges Cywie, fueron detenidos el pasado fin de semana, acusados de cobrar 210 millones de pesetas en comisiones. Claes, que. en 1988 era ministro de Asuntos Económicos de Bélgica, insistió ayer en que desea ser interrogado por el fiscal que investiga el caso. "Como responsable de una organización internacional no puedo permitirme el lujo de ser considerado como alguien que actuó ilegalmente. Si las autoridades judiciales me necesitan, estoy a su inmediata disposición", dijo el secretario general de la OTAN, que fue elegido para su actual cargo en septiembre pasado.

La prensa belga informó también que los investigadores del escándalo pensaban interrogar al actual comisario de la Unión Europea Karel van Miert, que en 1988 era el presidente del Partido Socialista Flamenco. Van Miert difundió un comunicado en el que aseguraba "no haber aceptado jamás ni un céntimo".

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