Programas libres para todos y sin piratería

El desarrollo de la World Wide Web no se ha detenido ni un momento, y en 1993 apareció una pieza que encaja perfectamente con ella para hacer la vida más fácil al navegante de la red informática: el Mosaic, un interfaz gráfico de usuario (programa que cada uno instala en su ordenador y que presenta en la pantalla los datos y las opciones) hecho por el National Center for Supercomputing Application (Estados Unidos). Hasta entonces, los documentos se enviaban y recibían por Internet sólo en forma de textos, mientras que Mosaic Maneja también imágenes y es capaz de gestionar transmisiones de audi...

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El desarrollo de la World Wide Web no se ha detenido ni un momento, y en 1993 apareció una pieza que encaja perfectamente con ella para hacer la vida más fácil al navegante de la red informática: el Mosaic, un interfaz gráfico de usuario (programa que cada uno instala en su ordenador y que presenta en la pantalla los datos y las opciones) hecho por el National Center for Supercomputing Application (Estados Unidos). Hasta entonces, los documentos se enviaban y recibían por Internet sólo en forma de textos, mientras que Mosaic Maneja también imágenes y es capaz de gestionar transmisiones de audio y vídeo, además del correo electrónico convencional."Con Mosaic, el proyecto Web ha cambiado la forma en que la gente ve y aporta la información; se ha creado la primera red hipermedia realmente global", afirma Kevin Hughes, especialista de Enterprise Integration Technologies, de Estados Unidos. Los auténticos dueños de la Web son los millones de personas que la usan, que ofrecen en ella información o la obtienen, y toda la tecnología W3 es de dominio público; es decir, ha sido puesta por el CERN a disposición de todos, por lo que utilizar el software de la Web y el Mosaic no constituye piratería electrónica. Los programas de ambos (para cualquier ordenador conectado a Internet de potencia de un PC 386 o superior) se obtienen en la propia red.

El usuario de la Web puede encontrar accesos cerrados, servidores que le niegan la entrada, ya sea porque exijan una suscripción de pago para acceder a la información (como en la Enciclopedia Britannica, donde es gratis únicamente una secuencia de demostración y las instrucciones para abonarse), o porque una empresa o institución tienen parte de su red o bases de datos cerradas para el público y sólo se abren con clave.

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