Úrculo ahonda en la nostalgia viajera

El escultor expone sus últimas obras en bronce patinado

Eran viajeros de sombrero flexible de los años treinta y pesado maletón cuadrado. A esos aventureros que viajaban sin billete de vuelta rinde homenaje Eduardo Úrculo en la exposición que hoy se inaugura en la Galería 4.17. Hacía dos años que este escultor de 56 años no mostraba sus trabajos en Madrid. "Quiero evocar la épica de los grandes viajes, no la de jet y equipajes ligeros", cuenta Úrculo.

Frutas que emergen de un sombrero, maletas repletas de libros, pinceles, gabanes y viejos paraguas. Son algunas de las piezas que se pueden ver en esta exposición que recoge la última obra ...

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Eran viajeros de sombrero flexible de los años treinta y pesado maletón cuadrado. A esos aventureros que viajaban sin billete de vuelta rinde homenaje Eduardo Úrculo en la exposición que hoy se inaugura en la Galería 4.17. Hacía dos años que este escultor de 56 años no mostraba sus trabajos en Madrid. "Quiero evocar la épica de los grandes viajes, no la de jet y equipajes ligeros", cuenta Úrculo.

Frutas que emergen de un sombrero, maletas repletas de libros, pinceles, gabanes y viejos paraguas. Son algunas de las piezas que se pueden ver en esta exposición que recoge la última obra escultórica de Eduardo Úrculo, mas de 17 obras de bronce trabajadas en una fundición de Madrid durante este año.El misterio que esconde una maleta, los sueños. que transporta y las expectativas que genera están detrás de cada pieza. El viajero, un personaje recurrente en la obra de este escultor nacido en Santurce que se considera asturiano, vuelve, a ser una vez más protagonista.

"El viaje es una constante existencial", declara Úrculo, les evolución, movimiento, y forma parte de nuestro origen nómada. La vida misma es un viaje. Entre el nacer y el morir todos deseamos que la travesía sea buena y larga", comenta. Y mediante maletas y sombreros, cuenta, historias de esos viajeros, colmo Paul Bowles, que emprendían una aventura al subirse a un barco y que tal vez acababan quedándose toda la vida en el punto de destino. "Los viajeros de ahora no aportan grandes cosas al sitio al que llegan y no se traen gran cosa cuando vuelven", cuenta.

La utilización de bronce patinado, que permite una mayor viveza en los colores para lo que suele ser habitual en este metal, es una de las aportaciones de los nuevos trabajos de este artista polifacético. "Esos colores forman parte de mi discurso pictórico", explica.

Vargas Llosa y Úrculo

Mario Vargas Llosa, amigo del escultor, escribe una carta que sirve de presentación de. esta exposición. "Él es mucho más viajero que yo y tiene la ventaja como todos los escritores, de que puede escribir en un hotel, o en un café cuando se va de viaje". dice el escultor. "Yo tan sólo puedo hacer bocetos".Úrculo sigue de cerca el trabajo de jóvenes artistas. "Estuve hace unos días. en la Bienal de Zamora y quedé francamente impresionado". Y refleja la abundante producción de buenos pintores españoles con una anécdota. Cuando estaba empezando su carrera, llegó a un París inmerso en la crisis a hacerse un hueco. Con sus cuadros bajo el brazo, se presentó en una galería en la que le dijeron que no hacía falta que los desembalara: No había presupuesto. "Si usted es español", le dijeron, "seguro que es muy bueno, porque España produce grandes pintores y muy buenas chicas de servicio. Pero no podemos hacerle un contrato en este momento. Así es la crisis".

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Esculturas de Eduardo Úrculo. A partir de hoy, y durante un mes en la Galería 4.17 (Príncipe de Vergara, 17). Entrada Libre. De lunes a viernes, de 1030 a 14.00 y de 17.00 a 20.30. Sábados, de 10.30 a 17.00. Domingos, cerrado.

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