"El momento del nacimiento es crítico para el nuevo ser''

"En los últimos 20 años se ha producido un importante descenso de la mortalidad perinatal en todos los países desarrollados. El mayor conocimiento de los complejos mecanismos de adaptación del niño de la vida intrauterina a la vida después del parto ha permitido salvar a bebés que nacían con problemas, abocados a morir, y a prematuros de muy bajo peso", afirma el doctor Abraham M. Rudolph, jefe del departamento de pediatría del Instituto de Investigación Cardiovascular de la Universidad de California, en San Francisco (Estados Unidos).Este experto, que está considerado una primera autoridad mu...

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"En los últimos 20 años se ha producido un importante descenso de la mortalidad perinatal en todos los países desarrollados. El mayor conocimiento de los complejos mecanismos de adaptación del niño de la vida intrauterina a la vida después del parto ha permitido salvar a bebés que nacían con problemas, abocados a morir, y a prematuros de muy bajo peso", afirma el doctor Abraham M. Rudolph, jefe del departamento de pediatría del Instituto de Investigación Cardiovascular de la Universidad de California, en San Francisco (Estados Unidos).Este experto, que está considerado una primera autoridad mundial en neonatología, ha centrado sus investigaciones en los cambios que experimenta la circulación sanguínea y la función cardiopulmonar en el niño antes y después del nacimiento. Rudolph estudia actualmente, en modelos experimentales animales, los cambios que sufre el feto antes y después del parto. "El momento del nacimiento", aclara "es una situación crítica para el nuevo ser. Desde el instante en que se corta el cordón umbilical, el bebé tiene que aprender a desarrollar por sí solo muchas funciones que antes le venían aportadas por la madre, como la respiración o el mantenimiento de la temperatura corporal. El paso a la nueva vida extrauterina exige unos mecanismos de adaptación que provocan unos cambios importantes en el pequeño".

La profundización en el conocimiento de esos mecanismos", concluye "nos está ayudando a comprender e intentar solucionar algunas de las dificultades que tienen los niños al nacer", dice Rudolph.

"En unas dos décadas hemos pasado, en prematuros de menos de 700 gramos de peso, de una supervivencia del 5% a más del 60%. En el caso de los prematuros de entre 700 y 1.000 gramos, esa supervivencia ha dejado de ser del 40% para alcanzar el 90%", explica este neonatólogo, que ha viajado a Madrid para participar en un congreso de pediatría celebrado en el hospital Gregorio Marañón con motivo del 25º aniversario de la creación de este centro.

Prematuros y problemas

Al hablar de prematuros, Rudolph prefiere expresarse en términos de peso y no de semanas de gestación, pues "puede haber errores de cálculo en el embarazo y es fácil equivocarse al considerar el tiempo de desarrollo intrauterino del bebé"."Los prematuros", dice, "plantean grandes problemas porque son seres inmaduros, al no haberse completado su periodo natural de formación, Presentan importantes dificultades respiratorias y de circulación sanguínea; no tienen bien desarrollado su sistema inmunológico o defensivo, por lo que son mucho más vulnerables a las infecciones; poseen una circulación cerebral muy sensible y están expuestos a hemorragias cerebrales, y también tienen problemas nutricionales, ya que su tracto intestinal no está totalmente desarrollado".

La aparición de la incubadora supuso un paso importante, aunque su función es muy reducida, pues se encarga fundamentalmente de mantener la temperatura corporal del pequeño, formando un receptáculo que se asemeja al claustro materno y que, además, le protege del ambiente.

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