La decisión de la ONU sólo beneficiará al baloncesto a corto plazo

El levantamiento de sanciones de la ONU a las repúblicas ex yugoslavas de Serbia y Montenegro fue ayer "bienvenida" por Juan Antonio Samaranch, presidente del COI, "por permitir a todos los deportistas de las dos repúblicas participar en todas las competiciones", pero en la práctica poco significará en la temporada recién iniciada. Sólo la selección de baloncesto podría participar en el Europeo de Atenas 95.

La ex Yugoslavia tardará aún en poder aprovecharse deportivamente del levantamiento, previsto inicialmente como un periodo de 100 días, y exhibir en los grandes torneos de clu...

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El levantamiento de sanciones de la ONU a las repúblicas ex yugoslavas de Serbia y Montenegro fue ayer "bienvenida" por Juan Antonio Samaranch, presidente del COI, "por permitir a todos los deportistas de las dos repúblicas participar en todas las competiciones", pero en la práctica poco significará en la temporada recién iniciada. Sólo la selección de baloncesto podría participar en el Europeo de Atenas 95.

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La ex Yugoslavia tardará aún en poder aprovecharse deportivamente del levantamiento, previsto inicialmente como un periodo de 100 días, y exhibir en los grandes torneos de clu-, bes y selecciones su gran potencial en deportes como el balonmano, el waterpolo o el fútbol. En baloncesto, aunque el calendario de clasificación para el Europeo de Atenas 95 ya está cerrado no sería de extrañar una maniobra del presidente de la FIBA, el serbio Borís Stankovic, para conseguirles una plaza. Aún es reciente el recuerdo de los Juegos de Barcelona, en que se organizó un preolímpico adicional que dio el paso a Lituania y Croacia.La Federación Internacional de Baloncesto (FIBA) prevé la posibilidad de admitir a la selección de Yugoslavia en la fase final de los Campeonatos de Europa de 1995. Una posible decisión al respecto podría ser tomada en la reunión del comité ejecutivo que se celebrará a finales de noviembre. En cualquier caso, el secretario general de la FIBA, Borislav Stankovic, que es serbio y desea actuar por este motivo con una cautela excepcional, condiciona la admisión a que las sanciones impuestas por la ONU sean levantadas de forma definitiva.

El problema para estructurar la competición del próximo Europeo, que se disputará el próximo verano en Atenas, es puramente organizativo puesto que la fase de clasificación para el mismo se encuentra en su meridiano. Se disputan cinco liguillas con cuatro equipos cada una, de las que saldrán los diez clasificados a los que se añadirán el actual campeón europeo, Alemania, y el país anfitrión, Grecia. Además, se prevé que varias federaciones se opongan a que Serbia y Montenegro estén en Atenas, puesto que será una de las principales candidatas a ocupar una de las cuatro primeras plazas que dan el pasaporte para los próximos Juegos Olímpicos de Atlanta en 1996. Los serbios cuentan conjugadores excepcionales como Divac, Danilovic o Paspalj, entre otros. El Partizán de Belgrado entrenado por Obradovic dio el último suspiro ganando la Copa de Europa de 1992 antes de ser vetados en las competiciones.

La FIBA, en todo caso, no prevé por el momento la admisión de los clubes yugoslavos en las copas de Europa debido a que los calendarios ya están confeccionados y a que este fin de semana se sortearán en Múnich las liguillas de estos torneos.

Donde no podrán inscribirse, tanto los clubes como la selección, es en las competiciones europeas de fútbol, donde ya están en marcha la Eurocopa 96 y los torneos europeos de clubes. Equipos históricos como el Estrella Roja o el Partizán tendrán que esperar a la próxima temporada, y la selección, al Mundial 98.

Con el mismo problema chocarán en otros deportes en los que marcaron una época, como el balonmano (ya están en marcha las competiciones europeas y el Mundial 95 ya tiene el cupo cerrado) y el waterpolo.

El levantamiento de sanciones apenas afectará a los deportes individuales, en los que serbios y montenegrinos podían participar sin bandera, como lo hicieron en los Europeos de atletismo de Stuttgart.

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